Cambios en los hábitos alimenticios podrían reducir el impacto al medio ambiente, como la disminución de consumo de carnes rojas y huevo

Para el 2050 seremos 10 mil millones de personas, un aumento de habitantes a escalas alarmantes. Aunque se diga que los recursos son renovables, estos son finitos, y las conductas y formas de vida son bastantes agresivas con el ambiente, así como las formas de consumo, expuso Emmanuel Santiago Cuadras.

Invitado para disertar la conferencia “Alternativas sustentables a la proteína de origen animal”, en el marco de las actividades del Día del Biólogo en la Facultad de Biología de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), el biotecnólogo expuso que una de las formas de contribuir al daño del ambiente es el modo de alimentación, citando de ejemplo lo siguiente.

“Para producir un kilo de carne o un litro de leche se requieren siete kilos de verduras para alimentar a las vacas u otros animales, de los cuales consumimos su carne y su leche, siendo esta una de las industrias que más producen gases de efecto invernadero debido a que las vacas son rumiantes produciendo en sus intestinos estos gases”, compartió.

La vaca, dijo, es una de las fuentes de proteína cárnicas preferidas a nivel mundial con producción masiva que repercute en la deforestación, al necesitar grandes pastizales para este tipo de animales, los cuales requieren de enormes cantidades de agua, contribuyendo la producción de carne a la pérdida de ecosistemas y biodiversidad de estas zonas.

Ahora, otro aspecto a comparar en la producción de un kilo de carne, si se habla de leguminosas, se requiere de estos aproximadamente 16 kilos de granos, lo que nos da una referencia de que con ello se puede alimentar a 16 personas al día.

Por lo que la carne, comparó, es muy poco sustentable si se toma de referencia que con tan solo un kilo de carne se alimenta a muy pocas personas, sin dejar de mencionar que para producir un kilo de carne se requieren de 15 mil 500 litros de agua.

Otro dato del por qué se deben de empezar a cambiar los hábitos alimenticios, es que el 30 por ciento de la superficie terrestre es ocupada por el ganado vacuno principalmente, donde al año se dice se producen hasta 53 millones de estos animales para su consumo, lo que es demasiado, además de que esta industria produce el 18 por ciento de gases de efecto invernadero a nivel mundial, destacó.

Otro aspecto es que estas fuentes proteicas de origen animal son una fuente de enfermedades zoonóticas.

Si observamos, señaló, estos efectos negativos desde los gases de efecto invernadero, la deforestación, la pérdida de especies, el alto uso de los recursos hídricos y el impacto en los alimentos, con base en ello, se dice que se deberían de consumir solo 170 gramos de carne roja y 5 huevos a la semana para poder disminuir este impacto.

Por lo que, en ese sentido, habría que preguntarse cuántas veces a la semana consumen carnes rojas, quedando expuestas así las conductas de alimentación, las cuales se pueden observar son bastante agresivas si se toma de referencia el impacto negativo al ambiente. 

Share

You may also like...