Sinaloa: sale José Carlos Álvarez de la CEDH y entra Oscar Loza Ochoa
Álvaro Aragón Ayala
Diputados del Congreso del Estado de Sinaloa seleccionaron, en sustitución de José Carlos Alvarez Ortega, a Óscar Loza Ochoa como nuevo presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) por un período de cuatro años con posibilidad de reelección por una sola ocasión.
La elección se desarrolló durante la sesión extraordinaria de hoy viernes, en la que Loza Ochoa alcanzó 34 votos a favor y luego rindió protesta ante el Pleno.
El proceso de selección, en el que Oscar Loza recibió el señalamiento de “ser compadre del gobernador Rubén Rocha Moya” inició con 12 aspirantes registrados, de los cuales siete lograron entrar a la etapa final. Sin embargo, en la votación final, sólo Lucila Ayala de Moreschi recibió cuatro votos, mientras que los demás candidatos no obtuvieron apoyo de los legisladores.
La sesión fue conducida por la Comisión de Derechos Humanos del Congreso, cuyos integrantes paradojicamente no son especialistas en derechos humanos. La toma de protesta estuvo a cargo de la presidenta de la Mesa Directiva, Yeraldine Bonilla Valverde.
Óscar Loza Ochoa posee una amplia trayectoria en la defensa de los derechos humanos en Sinaloa y de confrontaciones con autoridades del área de seguridad pública y de los gobiernos municipal y estatal.
Fue presidente de la CEDH del 2003 al 2007 y ha estado involucrado en diversas iniciativas a favor de la justicia social y la protección de garantías individuales.
Su “hoja de servicio” incluye su participación en el Frente Nacional contra la Represión en los años 70 y 80, así como su desempeño como miembro fundador de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos en el estado.
Además de su activismo, Loza fue diputado local (1983-1986), regidor en Culiacán (2008-2010), consultor de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y conferencista en universidades nacionales.
Colabora en distintos medios de comunicación en los cuales publica ensayos en temas de derechos humanos.
El presidente saliente de la CEDH, José Carlos Álvarez Ortega, duró en el cargo 8 años, tiempo en que fue señalado de simular la defensa de los derechos humanos y de ser insensible a los atropellos cometidos por funcionarios policiacos y personal de los tres órdenes de gobierno. Con Alvarez Ortega la Comisión fue una institución muerta.
