Pemex, el crimen y ambiente de negocios no tan amigable tiraron el PIB en tercer trimestre de 2025, considera el CEESP
Enrique Hernández
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advierte que la violencia e inseguridad, la crisis financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex) y un ambiente de negocios no tan amigable del gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo tiraron el crecimiento económico de México en el tercer trimestre de 2025.
“Buena parte de (la caída del PIB en el tercer trimestre de 2025) se puede atribuir a la caída en la minería que, con información disponible hasta el segundo trimestre del año, ya acumula ocho trimestres consecutivos a la baja”, afirma el órgano asesor del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
La menor producción de la industria minera se debe principalmente a la tendencia descendente que mantiene la producción petrolera de Petróleos Mexicanos, que a septiembre de 2025 suma 21 meses de manera ininterrumpida con variaciones negativas, según el ente privado encargado de hacer análisis económico.
“Otros factores que inciden en el debilitamiento de la actividad productiva del país, como un ambiente de negocios que no ha sido tan amigable, así como un estado de derecho que se percibe más débil, elevados niveles de inseguridad e impunidad en algunas regiones del país”, declara el instituto encargado de realizar investigación económica y política objetiva e independiente.
El producto interno bruto (PIB) de México se debilitó en el tercer trimestre del año al reportar una caída trimestral de 0.3 por ciento, respecto al mismo periodo del año pasado, recuerda el CEESP.
Agrega que el crecimiento económico entre junio a septiembre de 2025 mostró una disminución de la misma magnitud con igual período del año, lo cual representa su primera variación anual negativa desde el primer trimestre de 2021.
El mayor debilitamiento se concentra en las actividades secundarias, que cayeron 1.5 por ciento durante el trimestre y 2.8 por ciento respecto al mismo lapso del año pasado, acumulando ya cuatro trimestres a la baja, expresa.
Precisa que los mayores costos de producción y menores recursos para inversión inciden en buena medida en la actividad manufacturera y de la construcción, que también muestran debilitamiento en los meses recientes, provocaron la caída de la economía mexicana al tercer trimestre de 2025.
Tal parece que el debilitamiento de la actividad económica de México ya se resiente en el mercado laboral, afirma el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
De acuerdo con el Inegi, en septiembre de 2025 la población ocupada del país sumó 60 millones 094 mil 108 personas, lo que significó un aumento de 820 mil 149 respecto al mismo mes del año pasado.
“En términos relativos esto representó un avance anual de 1.4 por ciento, después de que un mes antes mostrara una disminución de 0.3 por ciento. Sin embargo, persisten señales de precarización del mercado laboral”, destaca el CEESP.
Los elevados costos de contratación hacen mucho más complejo a las empresas abrir nuevos puestos de trabajo, y los que se logran abrir se ofrecen con salarios reducidos, expone.
En septiembre de 2025, el aumento anual de la población ocupada total fue de un millón 540 mil 577 personas en puestos de trabajo con hasta dos salarios mínimos, mientras que el universo de ocupados con salarios mayores a dos salarios mínimos se redujo en un millón 301 mil 605 trabajadores. Los segmentos que no reciben ingresos o no especificados aumentaron en 581 mil 177 empleos.
“Un tema seguramente de mayor preocupación es el hecho de que la menor oportunidad que tienen las personas para ubicarse en el sector formal los obliga a buscar otras alternativas”, comenta el organismo privado.
Más de 830 mil 337 personas pudieron colocarse en la informalidad, mientras que los ocupados en la formalidad disminuyeron en 10 mil 188 mil.
“Esto propició que la tasa de informalidad laboral se elevara de 54.1% en septiembre de 2024 a 54.9% en el mismo mes del presente año.
“Es importante fortalecer las condiciones que permitan un crecimiento de la economía más elevado y sostenido, de tal manera que facilite la creación de mayores empleos de calidad, formales y mejor remunerados”, concluye el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
