Chocolate con el dedo

Rubén Cortés
Segalmex cambió de nombre y sigue con licencia para robar: María Luisa Albores replica en Alimentación para el Bienestar el modo de desfalco de Ignacio Ovalle en Segalmex. Otorga contratos a empresas fachada. En un año, va por dos millones.
Albores ya se la sabe. Como titular de Semarnat, dejó un daño patrimonial de 350 millones, pero López Obrador se la encargó a Sheinbaum para lo que era Segalmex, adonde se llevó a Víctor Manuel Muciño, su contralor de cabecera, quien también ya se la sabe.
Alimentación para el Bienestar hoy, como Segalmex ayer, simula competencia, crea empresas fantasma con direcciones inexistentes y, por ejemplo, hasta roba la identidad a una mujer desempleada para firmar contratos millonarios.
@MXvsCORRUPCION encontró a Vanessa Flores, cuya identidad fue robada para firmar contratos por más de 256 millones de pesos entre Konkistolo SA de CV, una empresa con apariencia de fantasma, y una dependencia Alimentación para el Bienestar.
Sí, es el ADN de Segalmex: un esquema de compra a sobreprecios, que se puede comenzar a llamar como el Cártel de la Canasta Básica, pues las transacciones son en tiendas ubicadas en sitios recónditos, donde es casi imposible inspeccionar en cuánto y qué compra.
La mayor turbiedad se focaliza en los productos estrella: chocolate, café y miel, ya que son comprados sin fiscalización a cooperativas campesinas, las cuales no pueden ser fiscalizadas. Es casi imposible verificar cuánto y qué compra Alimentación para el Bienestar.
El desorden y la opacidad en las compras millonarias a precios fuera de mercado, relegaron el debate de salud pública sobre el exceso de azúcar, grasa y calorías del chocolate del bienestar, como lo advierten los sellos octagonales de su presentación.
Como sea, a la directora Albores le falta explicar el costo del procesamiento y envasado del chocolate y del café, ya que es en la falta de transparencia en el esquema procesamiento y envasado de los productos, donde fue detectada la corrupción en Segalmex.
Bajo la dirección de Ignacio Ovalle en Segalmex, lo ocurrido en la Estafa Lechera fue que la crema de la leche tenía un alto valor en el mercado, pero después del proceso de secado se vendía a un precio muy bajo, lo cual resultó un negocio multimillonario.
A propósito de compras a sobreprecio, Alimentación para el Bienestar aceptó el 25 de agosto, en una tarjeta informativa, tener contratos con dos empresas revendedoras (Grupo Pelmu y FamilyDuck), tras una investigación de @MXvsCORRUPCION.
Se trata de cinco empresas enlazadas entre sí, y creadas hace apenas dos años, que obtuvieron asignaciones por casi dos mil millones de pesos: FamilyDuck, Todólogos.com, Pelmu, Konkistolo y Abastémade.
Alimentación para el Bienestar por Segalmex: sólo un cambio de nombre.
Y chocolate con el dedo.