Sinaloa: el ejercicio del periodismo es un privilegio. La falsedad envilece
Alfonso Carlos Ontiveros Salas
La difusión periodística admite pagos en numerario, pero sin faltar a la ética exigida
Cumplir con lealtad a la labor periodística merece elogios y un reconocimiento social. En el uso de esa libertad, ni ciudadanos ni periodistas pueden utilizar los medios de comunicación para agraviar ni para calumniar.
La naturaleza de la ética periodística está centrada en los valores del compromiso con la verdad, la independencia y de la responsabilidad social. Valores esenciales del periodismo.
Quien tomó su pluma y la asoció con su mente, de seguro saldría de ese binomio creaciones literarias en la construcción de notas de opinión o de sucesos propios para llevarlos a páginas periodísticas. La sociedad espera del periodismo un encuentro con la verdad, la ética y la objetividad.
La información es un servicio que construye, no es un ataque a las personas y mucho menos describir narrativas sin sustento, que más que información es difamación.
Cuando se utiliza la profesión periodística para atacar a las personas deja de ser periodismo para convertirse en una colación de codicias monetarias.
Es decepcionante que quien se formó en la digna profesión del periodismo utilice sus espacios informativos para disparar ofensas y engañar a sus lectores con leyendas muy distantes de la verdad a la que se debe.
La profesión no es un doble juego. Se ejerce con ética e imparcialidad.
La Universidad Autónoma de Sinaloa es una institución que avanza con sana dirección. El Dr. Jesús Madueña Molina, Rector Titular, ejerce un liderazgo reconocido no sólo por la comunidad universitaria, sino por una sociedad sinaloense que confía en su Universidad por sus indiscutibles estándares de calidad. Los padres de familia están orgullosos de la formación profesional de sus hijos porque reconocen el esfuerzo de sus maestros y trabajadores para seguir construyendo la universidad que le da oportunidad a los hijos de Sinaloa.
Por ello, el periodismo, si bien debe ser crítico, también debe contribuir a reorientar el pensamiento para perfeccionar sistemas de formación profesional, pero nunca descalificando los procesos de reforma para seguir labrando las mejores condiciones en el espacio donde se educa y se trabaja.
Las reformas en una administración que se vuelve más compleja y con mayores compromisos laborales, son inevitables y no puede mantenerse rígidas y sin cambios.
La reforma en la UAS es un imperativo para seguir creciendo y cumpliendo a cabalidad con la educación de los jóvenes de Sinaloa.
La reforma laboral, ya se veía venir desde hace bastante tiempo. La jubilación dinámica exigía cambios y los tiempos para aterrizarla ya están aquí.
Un cambio que desató la crítica de unos cuantos que han radicalizado con violencia y frases difamantes. Sin embargo, la comunidad universitaria reconoce y respalda la reingenieria en marcha.
El uso de las redes sociales para difundir narrativas groseras, infundadas y difamantes no cambiará las reformas aprobadas por abrumadora mayoría.
La libertad de manifestación del estudiantado Rosalino está fuera de toda duda. Es detestable y perverso que los adultos inconformes co la reingeniería manipulen la voluntad de algunos jóvenes.
El periodismo es verdad, objetividad, imparcialidad y ética. Ejercerlo así es un arma letal de convencimiento en una sociedad que confía en el periodismo y en su verdad. La falsedad, envilece y destruye.
