Adán Augusto y La Barredora, las contradicciones del senador de Morena sobre el grupo criminal

Rodulfo Reyes
El grupo criminal La Barredora salió a la luz pública el 4 de diciembre de 2020 mediante una cartulina en la que se adjudicó el asesinato de Andrés Rodríguez Vasconcelos, el Kalimba, identificado como cabecilla del robo de combustible a Pemex. En ese momento Adán Augusto López Hernández comenzaba su segundo año como gobernador, con Hernán Bermúdez como su secretario de Seguridad estatal.
Aunque en esos primeros momentos ninguna autoridad explicó o habló sobre el surgimiento de la organización criminal, la Fiscalía general del estado informó entonces que el crimen había sido cometido por un grupo que se disputaba el robo de combustible en la región de Chontalpa, en los límites con Veracruz.
Se difundieron fotografías del cadáver desmembrado y de la cartulina con el mensaje firmado por La Barredora, amenazando al grupo que lideraba el Kalimba.
Adán Augusto López encabezaba las reuniones diarias de la mesa de Seguridad, que se realizaban en Villahermosa, con la presencia del propio Bermúdez.
Una vez a la semana en estas reuniones participaban los directores de Seguridad Pública de los municipios, en las que se trataban hechos como el homicidio del líder huachicolero ocurrido en Huimanguillo y el mensaje adjudicado a La Barredora.
Otro hecho, del que también dio cuenta Proceso, tuvo gran resonancia en la vida pública de Tabasco: un día después del asesinato de Andrés Rodríguez, en las rejas de oficinas que pertenecían a la Fiscalía General del estado en el municipio de Cárdenas, frente a las instalaciones de la FGR, fue colgada una manta amenazando a varias personas presuntamente integrantes de la banda de el Kalimba. El mensaje también lo firmaba La Barredora.
Pese a las evidencias, el exgobernador y ahora líder de Morena en el Senado ha incurrido en varias contradicciones sobre el conocimiento que ha dicho tener sobre la existencia de la banda formada por policías en activo, así como sobre los señalamientos que desde tiempo atrás vinculaban a su hombre de confianza en materia de seguridad con la delincuencia organizada.
Tuvieron que pasar nueve meses para que López Hernández respondiera a la acusación contra quien fue su secretario de Seguridad y a quien en ese primer deslinde ni siquiera mencionó por su nombre, en respuesta al señalamiento de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien le pidió fijar su posición sobre el tema.
Desde el 13 de noviembre de 2024, apenas a un mes y medio de rendir protesta como gobernador, el morenista Javier May Rodríguez aseguró que en Tabasco era vox populi que el cabecilla de La Barredora era Hernán Bermúdez.
May ya enfrentaba la peor crisis de violencia que se recuerde en Tabasco, con ejecuciones de policías, quema de vehículos y negocios los fines de semana, y con un reguero de cuerpos descuartizados por todo el estado.

Ese día, en una rueda de prensa ofrecida en el Palacio de Gobierno, Javier May aludió a los exmandatarios Adán López y su sucesor Carlos Merino Campos, quien terminó el mandato del ahora senador cuando éste fue nombrado secretario de Gobernación por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador, el 26 de agosto de 2021.
Abiertamente May los retó a que de manera pública aclararan si habían tenido acuerdos con la delincuencia organizada.
A partir de entonces, reporteros buscaron a López Hernández para preguntarle sobre el señalamiento de su correligionario, pero el legislador replicó en un par de ocasiones que no podía responder porque no conocía la declaración de May, y el tema se diluyó.
El 14 de febrero de 2025 funcionarios del estado filtraron a medios de comunicación que un juez local obsequió una orden de aprehensión contra Hernán Bermúdez por los delitos de asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés.
La carpeta en su contra la inició la Fiscalía General del Estado (FGET), pese a que los delitos por los que fue señalado en un principio eran de índole federal.
El 12 de julio el comandante de la 30 Zona Militar con sede en Villahermosa, general Miguel Ángel López Martínez, confirmó en el noticiero vespertino de Radio Fórmula que desde el 14 de febrero de este año el secretario de Seguridad nombrado por Adán Augusto López ya tenía una orden de captura.
El militar aseveró que en el gobierno tabasqueño anterior (iniciado por el ahora senador López Hernández y terminado por Merino) hubo impunidad, pues a ningún líder de La Barredora se le había investigado formalmente.
Dijo que tuvo que iniciar la nueva administración, la de May, para que las autoridades liberaran las órdenes de aprehensión contra quienes habían estado desatando la ola de violencia en Tabasco.
López Martínez reveló, además, que el expolicía originario de Yucatán huyó, tras enterarse de la orden de captura, vía aérea de Mérida hacia Panamá, e indicó que la última ubicación que se conocía de él era Brasil.
A mediados de julio (es decir, nueve meses después de que el gobernador May lo emplazó a dar la cara por el caso de su colaborador), Adán Augusto López subió un comunicado a su cuenta de X (antes Twitter) en el que ya mencionaba investigaciones por La Barredora, pero sin mencionar el nombre de Bermúdez:
“Fui gobernador de Tabasco desde el 1 de enero de 2019 hasta el 26 de agosto de 2021, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador me invitó a acompañarlo como secretario de Gobernación. Durante mi gobierno enfrentamos grandes retos en materia de seguridad, y logramos reducir sustancialmente la actividad delictiva, como muestro en la gráfica adjunta”.
Enseguida, apuntó:
Es público que se iniciaron investigaciones contra integrantes de aquel gobierno, y considero fundamental que deben presentarse ante las autoridades para aclarar los hechos.
En este comunicado, el líder morenista en el Senado agregó: “Aunque no he sido requerido, estoy a la orden de cualquier autoridad que solicite mi presencia”.
El 21 de julio López Hernández dio una entrevista a Ciro Gómez Leyva, a quien le dijo que en el tema de su excolaborador había “mucha desinformación” y “politiquería”.
En una imprecisión, afirmó que en su comunicado en la red X había pedido que se investigara a Hernán, al que nunca mencionó en esa ocasión.
En tanto, sobre cómo lo designó titular de Seguridad, dijo:
Yo conozco a Bermúdez desde hace muchos años, es un policía de trayectoria en Tabasco, lo conocí, coincidimos (en 1992) cuando yo fui subsecretario de Gobierno… ha sido una gente de trayectoria en Tabasco.
En la entrevista, Adán Augusto dio cifras para avalar que en su gestión había bajado la incidencia delictiva y adjudicó estos resultados a la labor de él y de su colaborador Bermúdez.
Fue en esta charla cuando se presumió ser “el gobernador con mayor presencia en las mesas de Seguridad” en su gestión entre el 1 de enero de 2019 y el 26 de agosto de 2021.
Pero a pregunta sobre la estructura de La Barredora, López Hernández respondió que la primera vez que oyó mencionar a esa organización fue cuando ya era secretario de Gobernación, cargo al que llegó en agosto de 2021.

“Nunca lo escuché en Tabasco”, sostuvo.
Indicó que supo de La Barredora cuando se dio a conocer información de la Secretaría de la Defensa extraída mediante hackeo por el grupo Guacamaya Leaks, en octubre de 2022.
“Mi responsabilidad institucional (como gobernador de Tabasco) terminó el 20 de agosto de 2021”, dijo en esa entrevista, en la que también aseguró que si en ese entonces hubiera sospechado de su secretario de Seguridad, “de inmediato lo hubiera separado del encargo”.
El 6 de agosto, molesto, desde la tribuna de la Sesión Permanente del Senado Adán Augusto llamó seudoperiodistas y seudocolumnistas a quienes han abordado en los medios el tema de La Barredora y sus posibles vínculos con el grupo criminal.
“Toda su tiznadera me tiene sin mayor cuidado”, dijo.
Pero el 12 de septiembre, unas horas después de que se dio a conocer la detención de Hernán Bermúdez en Paraguay, en un nuevo comunicado López Hernández aseguró que “los que participamos de este movimiento no somos cómplices de corrupciones”, e hizo una afirmación sobre la que previamente no había hecho mención alguna: que él mismo pidió que se investigara a fondo a su excolaborador.
Al final del presente texto, Proceso recupera un video en el que Bermúdez Requena se dice inocente tras las filtraciones que el grupo Guacamaya Leaks hizo luego de hackear archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional en 2022.