Claudia, Xóchitl, la UAS, la ANUIES y la “Ley Rocha”

Álvaro Aragón Ayala

En la ruta de un nuevo proyecto para el fortalecimiento y transformación de la educación superior, rectores integrantes de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior -ANUIES- expondrán ante Claudia Sheinbaum Pardo y Xóchitl Gálvez Ruiz, una precandidata de Morena y la otra candidata virtual del Frente Amplio a la presidencia de la República, la Ley de Educación Superior de Sinaloa como un modelo o régimen jurídico regresivo que atenta contra las autonomías universitarias.

El plan de la ANUIES que agrupa a 211 universidades del país es exhibir la también conocida como “Ley Rocha” como un instrumento que trasgrede la autonomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa y que, de ser replicada en otros estados, colapsaría el sistema de universidades públicas estatales autónomas, regresándolas a la época de la represión gubernamental, colocándolas a expensas de los apetitos políticos de los gobernadores que pujan por el control de las universidades públicas autónomas.

La Ley de Educación Superior de Sinaloa que generó rechazo en la ANUIES fue elaborada por instancias del gobernador Rubén Rocha Moya con el propósito de meterse a las entrañas de las tres universidades estatales de Sinaloa, pero principalmente en la UAS, la cual intenta dominar e instaurarle un sistema “administrativo” violatorio de la autonomía, para normar o controlar a la universidad desde el gobierno del Estado, el Congreso Local y la Secretaría de Educación Pública y Cultura.

La ANUIES tiene planeado plantear la “Ley Rocha” a Claudia Sheinbaum y a Xóchitl Gálvez como un instrumento nocivo toda vez que violenta el principio de autonomía universitaria y fluye en contra de la esencia de las Universidades y de lo establecido por la Constitución. Luis González Plascencia, secretario ejecutivo de la ANUIES calificó la ley como un “un intento de intromisión del Gobierno estatal en la universidad para tomar decisiones que solo les competen a los universitarios”.

Desde la perspectiva de la nueva agenda de transformación universitaria, la ANUIES pedirá, dentro del debate democrático que habrá de sostener con quienes aspiren a dirigir los destinos de la nación, garantías para impedir que la Ley de Educación Superior de Sinaloa, elaborada por Rubén Rocha, sea replicada en los estados del país, porque obstaculizaría las funciones fundamentales del sistema de educación superior.

En el marco de la transformación, proceso en el que no encaja la ley de Rubén Rocha, el sistema de educación superior debe estar regulado y evaluado de forma constante bajo la dimensión y la visión de las autonomías de las instituciones, para que, desde la plena libertad académica, la diversidad de los modelos que lo conforman, pueda responder a las demandas de la sociedad en la que se desenvuelve y la influye, en una perspectiva dinámica, prospectiva y responsable.

El gobernador de Sinaloa, desde la óptica de la ANUIES, genera presiones sin límites a la Universidad Autónoma de Sinaloa para desestabilizarla en medio de una dialéctica de escenarios pretendiendo alterar el significado de la universidad ciencia para intentar zambullirla en la ruta de la universidad anárquica, fabricando delitos contra los funcionarios de la Casa Rosalina en represalia porque no lo dejan meterse a “gobernar” la Universidad.

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