Los capos del transporte y Marcos Osuna. Las transas en Sembrando Vida y el “operador” financiero

Álvaro Aragón Ayala

EL PULPO CAMIONERO: Hay un sector que se mueve entre la luz y la obscuridad y que desenterró el hacha de guerra para defender su coto de poder tope en lo que tope. Se trata del “gremio alterno de transportistas” que ve amenazados sus negocios. Resulta que el director de Vialidad y Transporte, Marco Antonio Osuna Moreno, advirtió que auditará todas las organizaciones de transportistas (concesionarios y permisionarios de transporte urbano y foráneo de pasajeros, de jornaleros agrícolas, de carga en general, aurigas, taxis, de educandos y empresarial) ¿Qué irá a encontrar? ¿Cientos o miles de “piratas” con los que nadie se mete por temor a desencadenar la furia de los poderes fácticos armados? El “todo terreno”, como se le conoce a Osuna en los círculos políticos, argumentó que la investigación se realizará “a fin de verificar que los conductores tengan certificados o gafetes de aptitud vigentes y que las unidades de servicio público operen con toda la documentación legal y en regla y pólizas de seguro vigentes”. Quienes operan al margen de las concesiones y permisos del gobierno del Estado son gente poderosa dispuesta a parar en seco a Marco Antonio Osuna, quien se estrena como funcionario morenista y pretende quedar bien en el Tercer Piso. Osuna advirtió también que auditará las 26 delegaciones de Vialidad y Transportes para verificar la observación de los procedimientos y aplicar mejoras en la atención a los contribuyentes. A ver si se atreve a descabezar a delegados y subdelegados que, con sus transas subterráneas, se integraron ya a la casta divina de la 4T. Trae lana en la bolsa y escupen por un colmillo. 

CRÍA CUERVOS: Marlene León Fontes, directora de Iniciativa Sinaloa, dijo que la virtual desaparición de la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública, marcará un retroceso de 20 años en materia de transparencia. Lo paradójico es que, salvo prueba en contrario, algunos miembros de la CEAIP cultivaron por años amistad con personajes de la izquierda que mutaron a Morena y que hoy se convirtieron en los verdugos de su Comisión y los dejarán sin trabajo.

GOLPE BAJO: El alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil, le pegó un gancho al hígado a las asociaciones civiles y de comerciantes, locatarios y vendedores ambulantes que integran el Frente Ciudadano Primero Culiacán con los que había establecido compromisos y “relaciones de cooperación”. El munícipe prometió no otorgar más permisos de bazares y tianguis en áreas cercanas al primer cuadro, para no obstruir los espacios peatonales. El presidente municipal no cumplió y concedió el aval a decenas de mini-comerciantes, ajenos al Frente para que se instalaran en la Plazuela Municipal.

Óscar Sánchez, vocero del Frente Ciudadano Primero Culiacán y que preside la Unión de Comerciantes de Culiacán, denunció que al otorgar los permisos a “fuereños” la comuna fomenta la competencia desleal. “Se trata de personas que llegan a aprovechar la temporada, vendiendo las mismas cosas que los locatarios establecidos, pero que no han tenido que soportar ni amortiguar todas las pérdidas que nosotros hemos venido absorbiendo a lo largo de los últimos meses”, dijo.

EL OPERADOR FINANCIERO: Los thrillers invaden los medios de comunicación. Las narrativas novelescas alimentan el morbo de la sociedad. Los publicistas y gubernamentales y creadores de imagen por paga se dan vuelo inventando escenarios de capturas de delincuentes para tratar de convencer al respetable público que el combate al crimen va viento en popa. Se difundió que las autoridades federales detuvieron a un operador financiero que más bien parece un arqueólogo, por aquello de que anda de ruina en ruina. “Un operador financiero de una organización criminal es el cerebro que está detrás de las complejas transacciones monetarias y financieras que deben realizarse para ajustar a la legalidad fiscal el dinero procedente de negocios delictivos o injustificables. Es decir, la actividad en la cual una persona o una organización criminal  procesa las ganancias financieras de actividades ilegales, para tratar de darles la apariencia de recursos obtenidos de actividades lícitas” (definición anotada en la edición española de Wikipedia). “Lavar dinero” no es cosa fácil y requiere un alto grado de conocimientos de finanzas y negocios. Para realizar este tipo de operaciones se necesitan los servicios de contadores conocedores del derecho fiscal, abogados financieros, personas externas que conozcan los modelos económicos del sector financiero y de la administración de finanzas. Entonces ¿A quién detuvieron? Todo quedó reducido a la fotografía, al boletín y al despliegue publicitario de los “buenos resultados” contra el hampa.  

SEMBRANDO MENTIRAS: La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo habría ordenado levantarle una investigación a Alejandro Apolo Acosta Cota, coordinador en Sinaloa del Programa Sembrando Vida, debido a que promociona cuentas alegres que lo zambuten en la sospecha. Pregona que en Sinaloa hay 170 mil “sembradores” y que se están reforestando 23 mil hectáreas en zonas serranas y rancherías, etcétera. Si no hay condiciones para la reforestación por la ausencia de lluvias y si la inseguridad es un obstáculo para la libre movilización de los trabajadores en los municipios serranos ¿Cómo se está desarrollando este programa? No se trata de reforestar por reforestar. Para ingresar al Programa Sembrando Vida se requiere ser sujeto agrario que habite en un municipio o localidad con rezago social y tener disponibles 2.5 hectáreas para trabajar en un proyecto agroforestal. Esas 2.5 hectáreas se tienen primero que desforestar, talar, limpiar, para luego plantar árboles frutales y darles forma de “viveros comunitarios”. Sinaloa es un estado vulnerable por los cambios climáticos por lo que el Programa no es factible. Hay beneficiarios del programa -5 mil pesos mensuales- que talan y queman árboles y todo tipo de arbustos con tal de recibir el apoyo económico, pero no siembran nada, provocando daños irreversibles al medio ambiente. Además, en la sierra, hay terratenientes que acumulan y simulan pequeñas propiedades y matriculan como beneficiarios a la esposa, al hijo del primo, o meten gente con distintos nombres cuando se trata de la misma persona e inscriben predios que están arrendados. Se sospecha que Alejandro Apolo Acosta está abultando su cuenta bancaria con el manoseo del Programa Sembrando Transas, perdón, Sembrando Vida.