Sinaloa ¿A merced del crimen organizado?
José Carlos Ontiveros Salas
No es momento para que los mandos de la policía estatal se justifiquen. El crimen organizado impone las reglas del juego. No hay autoridad para detenerlos.
Hechos que impactan en lo local y nacional. Zafarrancho nuevamente en zonas pobladas de Culiacán, hoy fue escandalosamente en la Campiña. Capacidad de respuesta policial no se vio por ninguna parte.
ampoco en la Guardia Nacional. Un puñado de delincuentes sometieron vergonzosamente a la milicia POLICIAL porque no supieron cómo reaccionar ante lo sorpresivo del ataque armado.
Ante los disparos corrieron a guarecerse. Era natural. Se ocultaron debajo de las camionetas. No se realizó con inmediatez ningún despliegue que permitiera enfrentar y cercar a los delincuentes y detener a toda esa pandilla de criminales.
Se hicieron bolas en otras palabras. Corrían a protegerse y los delincuentes gastando municiones. Por fortuna no lesionaron a nadie. Los civiles corrían atemorizados y algunas personas al borde de la histeria ante el temor de verse lesionado por las balas.
No cabe duda de que las complicidades están resultando muy preocupantes. Los delincuentes andan sueltos, hacen lo que quieren porque no hay quien los detenga. Circulan por la ciudad y por el Estado con total libertad. La autoridad no existe para ellos.
Fue un golpe muy duro para la tranquilidad de los culiacanenses; se dio la orden de que los negocios se cerraran para no exponer a los trabajadores y a la clientela de compras. El asunto estuvo pesado y aun así, las autoridades niegan que la inseguridad sea un motivo de alarma social. La Guardia Nacional se vio muy rebasada porque no supo que hacer, se hicieron bolas como siempre ocurre, pero como dicen, después de conejo huido, pedradas al matorral.
¿Qué sucede en Sinaloa? ¿Se seguirá sosteniendo el favor al Presidente de la República y al Secretario de la Defensa Nacional de soportar a militares incapaces para detener a los delincuentes?
Enfrentamientos en diversos frentes y aun así se conservan en sus puestos los titulares de seguridad pública. No cabe duda de que la fuerza castrense está activa para proteger a los ineptos y evidenciar lo comprometidos que están, no con la sociedad sino con quien violenta la tranquilidad de la población.
Cambie su discurso Gobernador. Acepte que no tiene autoridad para quitar a los mandos militares, pero a los demás miembros de su administración no solo los remueve, sino que también los exhibe como inconvenientes para su gobierno. ¿La estructura de mandos militares en las corporaciones de policía llenará ese vacío de autoridad que se está sintiendo en Sinaloa?
Bastante delincuente impune y muchos delitos que investigar. El rezago se vuelve insostenible y se está premiando a la impunidad ¿Se espera Gobernador que sigan muriendo civiles por las balas asesinas de los delincuentes protegidos por ya sabes quién?
Ningún programa preventivo habrá de funcionar si no se impone orden y castigo al infractor de la ley. Ya paren esos desfiles de vehículos con gente armada, no se excusen que no los ven, que hasta los niños saben lo que llevan y donde están.
¿Es cinismo o verdad que esos hechos ocurren por la continua movilización policial? lo cierto es que el delincuente ataca y ni cuenta se dan o están cumpliendo ordenes que porque también son personas no los deben lastimar? Mucho desfile vehicular con gente armada que arrodilla a la autoridad y la fuga asegurada.