Llevaba una “doble vida” periodista de El DEBATE
Álvaro Aragón Ayala
Ciudad de México.- Investigadores federales, apoyados con datos concretos, determinaron que el periodista estrella de El Debate y autor de la columna El Ancla, Luis Enrique Ramírez Ramos, llevaba una “doble vida”, una a la luz de la sociedad y otra “nocturna”. Las pesquisas arrojaron que no fue asesinado por su labor periodística.
Las indagatorias en torno a las relaciones interpersonales de Luis Enrique y los resultados de la autopsia psicológica -con datos de su psicobiografía personal-, arrojaron pormenores sorprendentes que nada tienen que ver con la actividad periodística.
Para no violar el debido proceso y no revictimizar a Luis Enrique Ramirez, la Fiscalía General de la República reservó los datos personales de la vida íntima del periodista y las relaciones que tejía por las noches que lo llevaron a tener “contacto” con quienes lo “levantaron” y asesinaron.
La Fiscalía General de la República pudo establecer que el periodista sufría constantes crisis emocionales que lo obligaron a internarse en busca de salud física y mental. Las autoridades ubicaron las clínicas de rehabilitación en donde fue atendido.
En menos de una semana de ocurrido el homicidio, gracias a las investigaciones del gobierno federal ya se tienen también identificados plenamente a los responsables del asesinato de Luis Enrique Ramírez y son personas relacionadas con el crimen organizado, muy probablemente dedicados a la distribución de drogas.
El subsecretario de Seguridad Pública federal, Ricardo Mejía detalló que el periodista fue forzado a subir a un auto. “De ahí lo trasladaron a un lugar indeterminado en donde estuvo privado de la libertad por varias horas”, dijo.
Precisó que, aunque aún continúan abiertas todavía todas las líneas de investigación, las pruebas y datos recabados hasta ahora, señalan que no hay ningún elemento que haga presumir que este homicidio esté vinculado a la actividad periodística.
Mejía Berdeja dijo que desde el momento en que se encontró el cadáver del comunicador de El Debate, hubo contacto entre la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Fiscalía del estado de Sinaloa para tener colaboración en las investigaciones.
Explicó que Ramírez fue secuestrado, subido a un vehículo y asesinado hacia las 2 o 3 de la madrugada del 5 de mayo, aunque el cuerpo se localizó hacia las 10:30 del día 6 de mayo.
Sostuvo que la familia de Luis Enrique Ramírez no denunció su desaparición. El periodista fue asesinado a golpes. La causa de su muerte fue traumatismo craneoencefálico, aunque tenía heridas de bala en la pierna. Confió en que se pueda detener pronto a los perpetradores del crimen.
Los investigadores descubrieron que el periodista Luis Enrique Ramírez llevaba una vida nocturna “muy intensa”.
Con información de Proyecto3