Los “fantasmas” de Quirino y Estavillo en la Fiscalía de Sara Bruna Quiñonez
Álvaro Aragón Ayala
El plantón de investigadores de la Fiscalía General del Estado en demanda de aumentos salariales y seguro de vida es tan solo un reflejo de lo que ocurre en las entrañas de esa dependencia y de que el plan de esclarecimiento de crímenes de alto impacto no está funcionando porque el personal dedicado a enriquecer con datos de prueba las carpetas de investigación es tratado como no prioritario en el engranaje del nuevo sistema penal acusatorio.
Si bien es cierto que la negativa de pago de salarios decorosos a los agentes es una herencia y fue la constante del nefasto gobierno de Quirino Ordaz Coppel que permitió que su Fiscal Juan José Ríos Estavillo desmantelara la Policía Investigadora, también es verdad que la “nueva” titular de la Fiscalía, Sara Bruna Quiñonez, no acciona todavía ningún plan para rescatar y modernizar el área de investigación de delitos.
Los agentes de investigación de la Fiscalía siguen trabajando con bajos salarios, sin equipo ni viáticos suficientes. Las indagatorias las desarrollan de manera rústica y en vehículos prestados o a pie por falta de unidades de la dependencia. Lo peor: los agentes trabajan “incómodos” ya que con el arribo de Rubén Rocha Moya al gobierno estatal esperaban la remoción del comisario de la Policía Investigadora, Marco Antonio Almanza.
El comisario de la corporación fue colocado ahí por Quirino Ordaz Coppel y trabajó “al ritmo” del ex Fiscal, Juan José Ríos Estavillo, operando igual que Cristóbal Castañeda, titular de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal: maquillando cifras sobre los resultados, uno en materia de investigación de delitos y el otro en el área de prevención. La forzada “parálisis” de los investigadores alentó la impunidad: cientos de asesinatos, desapariciones forzadas, feminicidios, robos de vehículos, etc., continúan sin ser esclarecidos.
En el engranaje de la Fiscalía General del Estado y en el nuevo sistema penal acusatorio la Policía Investigadora juega un papel clave, prioritario, por su facultad de investigar y recolectar evidencias, bajo el sistema de control y registro de la cadena de custodia (sistema de registro de las pruebas). Los agentes permiten al órgano acusador construir la teoría del caso que tendrá que determinar el cierre de las investigaciones.
El trabajo de la Policía Investigadora es fundamental en todo el armado de la carpeta de investigación y por tanto en la presentación de la denuncia o querella o en darle cuerpo legal, con datos de prueba, a las indagatorias que no requieren denuncias para su desarrollo porque se tratan de la atención de delitos que se persiguen de oficio como es el homicidio, el feminicidio, el abuso sexual con violencia, etc.
Los agentes investigadores de la Fiscalía realizaron una manifestación de protesta en las afueras del edificio central de la propia institución y en las vicefiscalías del norte y sur del estado, porque perciben salarios que no van acorde con el riesgo que corren ni con el desarrollo de su trabajo que realizan por duplicado o triplicado por la falta de más personal en esa área.
Los investigadores carecen de seguro de vida y otras prestaciones. El pago de viáticos es insuficientes, precario, lo que los empuja a gastar sus propios ingresos o a pedir dinero prestado a terceros para realizar las pesquisas. La Policía Investigadora no cuenta, además, con la suficiente tecnología para desarrollar indagatorias de carácter científico y no tiene el número necesario de vehículos para su movilización.
Los agentes revelaron que desde el segundo año de la administración de Mario López Valdez no reciben aumento salarial y demandaron oportunidad para buscar asensos o movilidad o promoción de plazas a otras áreas.
Sara Bruna Quiñonez tiene dos opciones, pero solo una para desterrar de la Fiscalía General de Justicia los “fantasmas” de Quirino Ordaz Coppel y de Juan José Ríos Estavillo, quienes prohijaron la impunidad desapareciendo, incluso, a la Policía Investigadora en territorios dominados por la delincuencia.
La Fiscal puede continuar con la política importamadrista de Quirino Ordaz y Juan José Ríos Estavillo o realizar cambios en la Policía Investigadora, promoviendo a la vez sueldos decorosos y seguros de vida para los agentes y la asignación de todas las herramientas para que desarrollen puntual y eficientemente su labor investigadora.
