Opera industria nacional del calzado a la mitad de su capacidad instalada…
Daniel Blancas Madrigal
La industria del calzado, motor de sobrevivencia para más de 450 mil familias en el país, ha peleado por cerrar múltiples puertas al contrabando: permisos especiales usados por traficantes para importaciones ilegales, programas sectoriales desventajosos, elusión fiscal, ingreso de productos a precios inferiores al costo y, ahora… aduanitas sin control.
“Logramos cerrar una puerta y los contrabandistas abren otras puertas, o el gobierno las deja entreabiertas con lagunas fiscales o legales. Los pares de zapatos que se evitan por un lado, entran por otro. No es suficiente poner candado en una puerta, se requiere una estrategia integral”, señala en entrevista con Crónica Juan Carlos Cashat Usabiaga, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (Ciceg).
Es la entidad donde se concentra el 70 por ciento de la producción de calzado: de los 320 millones de pares comprados en México al año, en Guanajuato se fabrican poco más de 215 millones, en especial en los municipios de León, San Francisco del Rincón y Purísima del Rincón. Con esa mano de obra guanajuatense, nuestro país se ubica como el noveno productor de calzado a nivel mundial.
Pero en ese abrir y cerrar de puertas del tráfico ilegal, en los últimos años el sector ha perdido más de 17 mil empleos en Guanajuato -y 20 mil en el renglón nacional- y suma 23 meses consecutivos en caída del PIB, tanto en producción como en empleo. Y hoy, sólo opera a la mitad de su capacidad instalada…
Una de las últimas puertas bloqueadas fue la del programa IMMEX, el cual permitía la importación temporal; por medio de trampas las redes delictivas burlaban reglas y fraguaban un ingreso definitivo, sin pago de impuestos. La industria del zapato presionó a las autoridades para ser excluidos de este esquema, lo cual se logró desde agosto de 2024.
“Con el IMMEX, en 2024 nos metieron de forma ilegal más de 40 millones de pares, salir de ese programa benefició la producción nacional, pero nos quedan pendientes otras batallas”, dice Cashat.
-¿Cuáles?
-Los permisos especiales que tienen supuestos importadores, hacemos un enérgico llamado a que se acaben, porque con un poco que se abra la llave, se atasca la coladera. También hemos enfrentado un grave problema de dumping (exportación a precios inferiores al costo de producción) con algunos países, en especial China. Hubo un proceso antidoping que finalizó hace algunos meses, se comprobó el daño y se impusieron cuotas compensatorias.
-No acaban los combates…
-También padecemos de elusión fiscal, productos que provienen de un determinado país y son malamente importados con etiquetas de otro país. Puede ser que el proceso de ingreso de realice de manera correcta, pero en el fondo hay una práctica desleal porque la procedencia es falsa: por ejemplo, un producto chino al que se impusieron cuotas compensatorias y, para burlarlas, se reetiqueta con origen en Vietnam, Indonesia o Camboya. La Organización Mundial de Comercio contempla procesos antielusión, pero son desgastantes.
-Y ahora se está conociendo el uso anómalo de los Recintos Fiscalizados Estratégicos, estas llamadas aduanitas…
-Al mismo tiempo que salimos del IMMEX se vio un incremento brutal de mercancía que entra por estas aduanas privadas, donde el control es mínimo, no sabemos qué pasa ahí dentro, no hay datos públicos, nos dejan a ciegas. Un aumento de más de mil por ciento.
-¿Qué trampas son posibles?
-Intercambio de productos, reetiquetados, valorizaciones irregulares, entra una cosa y sale otra diferente, entran a un precio y salen con otro. La autoridad te permite importar, mantenerlo ahí, e ir pagando impuestos como lo vayas sacando, pero se presta para cualquier ilegalidad.
-¿Quién está detrás de estos recintos?
-Son básicamente privados y sus cómplices: actores del comercio exterior.
-¿Qué están exigiendo?
-La reforma a la Ley Aduanera (que entrará en vigor en enero) contempla el tema, lo que buscamos es que se nos excluya en definitiva, que los zapatos y mercancías de otros sectores sensibles ya no puedan pasar por estos lugares.
-Parece una carrera interminable contra los contrabandistas y contra los chinos…
-El gobierno chino otorga muchos beneficios a la exportación, eso permite a los productores vender por debajo del costo interno y acaparar mercados. Hay vivales que dicen: este producto está barato, lo voy a vender en México y como aquí predomina la falta de regulación. Son como coches sin documentos, que se van por la libre, mientras nosotros somos un coche al que se le exigen un montón de requisitos, verificaciones, placas, no hay competencia pareja.
-¿Contrabandistas ayudados por actores oficiales de nuestro país?
-Sin duda, detrás de esto hay gente que conoce a detalle los procesos de importación y que identifica cuáles son los nichos propicios para abusar.
-¿Qué se requiere entonces?
-Una solución de fondo, definitiva, que pare en seco al contrabando. Todo esto ya se está considerando en el Plan México, el cual contempla a todas las industrias nacionales que necesitan ser arropadas y recuperadas. Los contrabandistas golpean por todos lados, urge algo integral, atacar un solo punto no moverá la palanca.
-Con todo lo que vemos de violencia e inseguridad en el país, qué importante sería una industria nacional sana, donde se protejan los empleos…
-Es vital, y más cuando se trata de una industria tan concentrada en una sola localidad, como la del zapato, que se focaliza en León y municipios conurbados. Cuando hay una industria pujante, creciente, se refleja en economía y seguridad. Ocupamos el segundo lugar en el estado en apertura de empleos, después de la industria automotriz. ¿Qué pasa cuando pones en riesgo miles de empleos? Ya lo estamos viendo.
-Y en lo interno, en un ejercicio de autocrítica, ¿cuáles son los retos para crecer?
-Tenemos que ponernos al día en los temas de tecnificación, innovación y diseño. Exportamos a muchos países, en especial a Estados Unidos, donde hay nichos importantes: por ejemplo, la bota vaquera se ha posicionado mucho, tenemos más del 70 por ciento del mercado norteamericano, hay marcas internacionales que producen en México, y nosotros tenemos marcas referentes en el extranjero. Pero hay que ir por más.
-¿Les falta aprovechar la tecnología y el marketing?
-La ofensiva es tan importante como la defensa, tenemos un programa de células exportadoras y en el rubro de inteligencia artificial y emprendimiento nos aliamos con el Instituto de Innovación del estado, abrimos ya la primera casa del emprendimiento, un espacio para que jóvenes puedan capacitarse en procesos tecnológicos. Hay que meterle al comercio electrónico, nos hemos rezagado y necesitamos ponernos las pilas.
-¿Qué están haciendo en esa vía?
-Creamos una nueva comisión de comercio electrónico, sesionamos periódicamente y estamos formalizando alianzas con Mercado Libre, Google y otras plataformas. Nos están dando facilidades para vender de manera más rápida y ágil, a un costo accesible. Queremos darle una nueva cara a la industria del zapato: defenderla de los contrabandistas y lanzarnos al ataque con mejor tecnología y visión a futuro…
RECINTOS FISCALIZADOS ESTRÁTEGICOS
Según el Apéndice 21 de las Reglas de Comercio Exterior de 2025, operan en el país 61, en las principales ciudades aeroportuarios y portuarias.
LOS DATOS
*La industria del calzado en Guanajuato representa 100 mil empleos directos y 450 mil al considerar toda la cadena productiva: suelas, agujetas, piel.
*En los últimos 4 años se han perdido 20 mil empleos a nivel nacional, 17 mil tan sólo en Guanajuato.
