AMLO: a mitad del sexenio: 1.- El periodismo Martinoli

Carlos Ramírez

El  https://ncmm.org/jyyzq9y12 nuevo modelo de periodismo político ante el poder lo pueden  https://elisabethbell.com/09w2t0o resumir muchos de los asistentes a las mañaneras a realizar preguntas, porque varios de ellos comienzan su  Ordering Tramadol Overnight intervención con estas palabras: “antes de las preguntas, presidente, una  https://www.mominleggings.com/62ogyghb sugerencia”. Y a renglón seguido  https://fotballsonen.com/2024/03/07/48zyrp9b5v aconsejan decisiones al jefe de gobierno y del Estado.

No es cosa nueva. En una de las historias del The New York Times se cuenta que en una ocasión el vocero presidencial Pierre Salinger le dijo al presidente Kennedy que debía  recibir, por segunda vez en un año, al corresponsal en la Casa Blanca de ese diario. Kennedy, con cara de  https://worthcompare.com/r9cu0jod fastidio, dijo que ya había hablado hacía poco con él. El vocero le señaló que era importante que el presidente de EU le diera percepciones del poder al principal  https://giannifava.org/jbzspuq diario de EU. Y Kennedy cerró la anécdota diciendo que el periodista  https://asperformance.com/uncategorized/icnc7tnzfv no llegaba por información, sino que se comportaba como  consejero especial del presidente.

Si el periodismo es  crítica y denuncia, aquí funciona en el  Order Tramadol From Uk modelo Christian Martinoli, un comentarista de futbol de TV Azteca que tuvo un altercado con el entrenador Miguel Herrera porque desde los micrófonos  https://www.worldhumorawards.org/uncategorized/e4yx8hij3 regañaba al director técnico de la selección, le decía qué debía de hacer y lo  https://www.lcclub.co.uk/cftr6fe5a7o destruía con ironías porque no le obedecía.

Ocurre lo  https://wasmorg.com/2024/03/07/mlpfk6kn5uc mismo con el periodismo político de opinión en el ciclo López Obrador:  no hay análisis, sino regaños, cuestionamientos, consejas e  https://worthcompare.com/kt94q19wd26 interlocución directa diciéndole al presidente qué  no debe hacer y que sí debe realizar. Todos los anteriores presidentes de la república se  reunían con comentaristas y había  Tramadol Buy Cheap intercambio de puntos de vista; hoy nadie va al despacho principal de Palacio Nacional y entonces desde los medios se dictamina  qué debe de hacer el presidente en función de la  https://tankinz.com/l9od029kpx óptica de los analistas, sin hacer el mínimo esfuerzo de evaluar el  https://www.mominleggings.com/jtfu31hl enfoque presidencial.

Los medios de comunicación eran parte de los sectores  invisibles del sistema política priísta, inclusive los más críticos: Echeverría  facilitó el golpe interno en la cooperativa contra Julio Scherer, pero esos periodistas  fundaron Proceso y otros medios críticos. De López Portillo a Zedillo  manipularon la publicidad gubernamental pagada porque sabían que los medios  http://countocram.com/2024/03/07/k8forv4yv carecían de autosuficiencia de recursos y  vivían de la venta de publicidad al Estado. Fox, Calderón y Peña Nieto  https://wasmorg.com/2024/03/07/jjmrvdwyj regresaron al reparto de dinero ya no tanto para controlar una crítica que había perdido  https://www.goedkoopvliegen.nl/uncategorized/agmc88r eficacia ante el poder y frente a la sociedad, sino para construir espacios de  http://countocram.com/2024/03/07/eatjgsmor propaganda.

El sistema priísta aplicó el  https://giannifava.org/x68wve95bc6 modelo de Vargas Llosa –tomado, quizá, de Aldous Huxley en su introducción a Un mundo feliz— de la  dictadura perfecta: mantener a los críticos  dentro del sistema, anulando no la crítica sino la  validez de las objeciones con contratos de publicidad y de producciones editoriales para el gobierno. Estas relaciones son el principal  Tramadol Overnight Mastercard argumento del presidente López Obrador contra la crítica en medios que hoy le quiere  dictar el rumbo de su gobierno o que le quiere  imponer comportamientos de poder.

Pero  no es lo mismo gobernar desde la dialéctica del poder  https://elisabethbell.com/xmexdoy9yu real que desde la torre de marfil de los medios. En vez de enojarse y  https://www.jamesramsden.com/2024/03/07/1upfsn1t5to provocar su caída, el entrenador Herrera debió de haber realizado un experimento:  https://www.worldhumorawards.org/uncategorized/dsbxyasqj intercambiar lugar con Martinoli: dejarlo un día dirigir la selección desde la  Get Tramadol Online cancha y él dedicado a  narrar desde la cabina los errores del improvisado.

Ahí se localiza la  ineficacia –para decir lo menos– de la prensa crítica frente al poder político de la base social de López Obrador. En los últimos meses ha habido una proliferación de críticas contra el presidente que a veces rayan en el insulto, pero muy pocas críticas reales. Una frase en la mañanera destruye críticos, en tanto que ninguna crítica hace mella a la pétrea base popular presidencial, inclusive por mucha razón que se tenga. El periodismo Martinoli hace reír, pero no modifica el rumbo del futbol en la cancha.

Los datos están a la vista: ningún presidente de la república desde Cárdenas ha tenido una prensa más adversa que López Obrador, pero su aprobación personal y la tendencia electoral de su partido es mayoritaria.

Algo, pues, está fallando en la crítica.

Con Información de Indicador Político

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