Fracasó comercialización del maíz…Y que sigue
Oswaldo Villaseñor
El gober Rubén Rocha estuvo en Los Mochis el día de ayer. Inauguró algunas obras que tiempo atrás vino a dar el banderazo. Son pocas las visitas que ha hecho al municipio de Ahome desde que asumió el poder.
Rocha estuvo en la tierra donde nació el movimiento agrícola que se apagó sin haberse resuelto nada. Es más, ha empeorado.
El dirigente de CAADES, Marte Vega dijo que no hay nada, ni voluntad del gobierno, e incluso, que él no fue a la manifestación de México porque los verdaderos problemas con la comercialización ya los tienen aquí. Ir a México no resuelve nada como no lo ha resuelto hasta ahora.
Lo cierto es que hoy cuando la cosecha ya se encuentra en su mero apogeo y al 30 por ciento aproximadamente, es tiempo de evaluar y empezar a revisar rubro por rubro de lo que se dijo se buscaba como objetivo e incluso, se pidió la confianza de los productores para su implementación.
Empecemos.
1.-De entrada, se dijo que con la intervención de Segalmex y Gobierno del Estado en la compra de 1.8 millones de toneladas, serviría para alentar a la alza los precios del maíz.
Bueno, cuando ya se tiene el 30 por ciento de la cosecha levantada, hay que empezar a evaluar y hacerse la siguiente pregunta.
¿Sirvió la estrategia del gobierno de comprar 1.8 toneladas para incentivar el mercado de los precios a la alza? La respuesta es que evidentemente NO.
El precio ayer del mercado andaba en los 4 mil 900 pesos, más con la base otorgada por el gobierno apenas alcanzaba los 5 Mil 206 pesos por tonelada.
Pero eso no es todo, los precios a futuro para julio del maíz perdieron casi 2 dólares ayer.
En pocas palabras, a estas alturas la primera evaluación pudiera decir que el plan del Gobierno que aún no termina de diseñarse bien, no funcionó y fracasó. No ayudó a subir los precios en el mercado.
Pero todavía hay algo peor. Esas 1.8 toneladas que compró el gobierno, aún están en las bodegas locales y estas están a punto de llegar a la saturación. Si esto llegará a suceder y no se actúa con rapidez, se pudiera llegar al caos total.
Primer saldo negativo.
2.-Se dijo que con este programa del Gobierno se buscaba doblegar a los industriales. Se logró. Evidentemente No. Ocurrió todo lo contrario.
El Gobierno les puso en charola de plata cuando menos 4 millones de toneladas de maíz que dejó libre a precio de mercado y hasta un poquito menos.
El negocio a compra actual y compra del año pasado, deja una diferencia de cuando menos 2 mil pesos por tonelada de maíz y que el industrial desde el año pasado indexó al precio de su producto final que es la elaboración de la harina de maíz.
Entonces estamos hablando de un jugoso negocio de cuando menos 8 mil millones de pesos.
Que no decía y dice el presidente que ningún jugoso negocio se hace en este país si no tiene el visto bueno del presidente.
Y este negocio tiene el visto bueno del presidente. Lo único que se puede afirmar, es que la postura del Presidente lo alentó y creo las condiciones para crearlo.
El industrial no solo no se doblegó, sino está encantado con el programa del gobierno. Será el mejor negocio de muchos años.
3.-También se dijo que conforme se evaluara la efectividad del programa, se buscaría la construcción de un buen precio para las 4 millones de toneladas de maíz que quedaron libres, e incluso, que el Secretario de Gobernación sentaría en la mesa con los productores a los grandes industriales. ¿Esto ha pasado? Evidentemente NO.
Adán solamente les hizo cambalache a los productores. Liberación de las instalaciones de Pemex por una reunión. Ya no hubo más y hasta la fecha no los ha vuelto a recibir.
Los industriales no tienen ni el menor interés y tampoco el gobierno por lo que se ve, de sentarse con los productores.
Carlos Hank González, el dueño de Maseca y uno de los herederos del grupo Atlacomulco se dice estaba en el extranjero el día de la elección del Estado de México que se entregó al presidente.
8 mil millones tan solo en la pura operación de la compra del maíz de Sinaloa, bien lo pueden valer.
Desde luego, todo esto pueden ser puras casualidades que se prestan a especulaciones, pero tienen un ingrediente de verdad. Los industriales a los que dijo el presidente que los iba a doblegar, a lo mejor si lo logró, pero no para beneficio de los productores, si no para sus propios fines políticos electorales y pagada con la producción de maíz sinaloense.
En la política dicen que no existen las casualidades.
O acaso está será una de ellas y la muestra de que si existen las casualidades?
¿Alguien lo cree?
Mucho por evaluar eso si.
4.-Los líderes de los productores se levantaron de la toma de Pemex para ir de nuevo al diálogo ¿Les funcionó? Evidentemente NO.
Entonces ¿que sigue?
Seguirán siendo “respetuosos” del gobierno o regresarán a la lucha.
Hoy los ingenuos o confiados y apáticos ya están con el agua a las narices. O brincan o se chingan, no hay de otra.
Ya se habla del regreso a la realización de acciones radicales para la próxima semana. Veremos si él hambre los hace dejar de ser tan respetuosos con el gobierno o siguen en la misma postura.
Por lo pronto, se puede decir que la primera evaluación o balance que se hace del programa de comercialización da como resultado un rotundo fracaso para el productor y un jugoso negocio para él industrial. ¿Y el gobierno que pitos toca?
¿Será acaso que tiene razón Lopez Obrador cuando afirma que todo negocio jugoso que se hace al amparo del poder, tiene el visto bueno del presidente?
En Sinaloa hay uno a la vista.
Habrá que estar pendientes.