El engaño y la doble cara

Carlos Noé Cota

La zona sur de Sinaloa posee un gran peso turístico y pesquero, principalmente Mazatlán, puerto que por su gran malecón, la inversión hotelera existente y el enorme desarrollo que presenta es un orgullo sinaloense. En materia política, el Municipio de Mazatlán vive un verdadero carnaval político-electoral donde se cuenta la historia de unos y otros. Los organismos sociales, empresariales y políticos saben lo que representan los puestos de gobierno, y por ello buscan ganar posiciones en las administraciones municipales sin que importe si son obtenidas por la vía democrática o son “impuestas” por el gobernante en turno. Saben que estar en el ánimo del alcalde o tener su confianza puede significar grandes ganancias.
Hurgando en la historia de este municipio, recordemos a JORGE RODRÍGUEZ PASOS, quien como candidato del partido del Trabajo al gobierno de Mazatlán, fue un fenómeno político-electoral. Posteriormente al tomar protesta como alcalde aseguró que desde ese momento se acababan los privilegios, la impunidad y se iniciaba la construcción de un gobierno para el pueblo. En aquel tiempo su operador político era JOEL HERNANDEZ NIÑO, quien además de ser su amigo, se convirtió en un puente importante entre él y el gobernador JUAN S. MILLÁN. Finalmente, esta administración municipal terminó hecha un desastre y JORGE RODRÍGUEZ PASOS fue desaforado como alcalde y se le giró una orden de aprehensión por los delitos de sustracción de menores, violencia familiar y lesiones, entre otras cosas.
En ese tiempo EDGAR GONZÁLEZ SATARAIN, era director de Bienestar Social y supuestamente tenía la encomienda de servir como “oreja” del Estado para informar lo que hacía o dejaba de hacer el alcalde RODRÍGUEZ PASOS. Cuando se da el desafuero, el Congreso del Estado designó a GERARDO ROSETE como alcalde sustituto y se dice que en su escritorio pusieron una relación cuya portada tenía la leyenda “Funcionarios Indeseables”. En esta relación estaba el nombre de EDGAR GONZÁLEZ SATARAIN, quien había traicionado al alcalde que lo cobijó en la dirección de Bienestar Social. Aun así, fue ratificado en su puesto por petición de su maestro y formador JOEL HERNÁNDEZ NIÑO.
Posteriormente, EDGAR GONZÁLEZ logró la Diputación Local por la alianza PAN-PRD; brincando de ahí a la alcaldía del Municipio de Rosario bajo el apoyo del PAS. Partidos que utilizó, traicionó y abandonó para refugiarse en los brazos de MORENA, donde obtuvo la Secretaría del Ayuntamiento de Mazatlán en la frustrada administración de LUIS GUILLERMO BENÍTEZ, que como sabemos también tiene su historia.
Ante el futurismo político del 2024, justo cuando el gobernador RUBÉN ROCHA MOYA requiere del apoyo de los gobiernos municipales, donde no debe haber doble cara y mucho menos deslealtades o traiciones ¿Cómo afrontará el gobernador las debilidades y deslealtades registradas que generaron alcaldes no formados en su establo político, mucho menos convencidos de la 4T?
Es indudable que el Gobernador ROCHA MOYA requiere de una gran visión política, de excelentes concertaciones, apoyo ciudadano, buena obra de gobierno y del apoyo de colaboradores fieles que sepan diferenciar entre sumisión, lealtad y amigos del poder.
AHOME Y TOPOLOBAMPO
En los últimos años, el modelo de desarrollo asiático se ha basado en una fuerte intervención y dirección por parte del gobierno, apoyo financiero al sector industrial por parte del sector bancario y un rápido desarrollo industrial.
Gracias a su excelente ubicación geográfica, El Puerto de Topolobampo es una opción potencial para el transporte de las regiones centro y sureste de los Estados Unidos, una puerta de entrada hacia los países de la Cuenca del Pacifico y un punto estratégico para realizar intercambios comerciales con países orientales.
Es aquí donde el gobierno federal tiene que ser justo y equitativo en la inversión federal, México no solo es el sureste del país donde se invierten miles de millones de pesos en obras como el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas, etc.
Actualmente, el Puerto de Topolobampo es disputado por 2 grupos: El que se opone a la construcción de la planta de fertilizantes y otro comandado por un grupo de inversionistas conformado por una mezcla de empresarios-políticos que tienen más de 12 años queriendo instalar dicha planta en terrenos que colindan con la Bahía de Ohuira ¿De qué tamaño será “el amor” que estos inversionistas y “socios” tienen por Topolobampo, como para aguantar tantos años de protestas, agresiones verbales y amparos?