El aguinaldo y la transferencia de recursos en las Universidades Públicas
Álvaro Aragón Ayala
En las Universidades Públicas Estatales la encomienda operativa del pago de los aguinaldos recae en las instituciones por su estatus legal de patrones. Sin embargo, cubrir la prestación navideña es una responsabilidad compartida o directa del gobierno federal y de los gobiernos estatales porque es su obligación la transferencia de recursos para cumplir con este beneficio laboral, más cuando prevalece un importante número de Universidades con déficit financiero debido a sus problemas estructurales y los estrechos presupuestos o subsidios que les otorga el Estado.
Si bien es cierto que las Universidades generan ingresos propios, las captaciones son mínimas. Es pues el Estado Mexicano el que Constitucionalmente tiene la obligación de sostener financieramente las
Instituciones de Educación Superior ya que la educación pública es considerada un bien y un deber u obligación del Estado (valga la redundancia). El financiamiento proviene, entonces, tanto del gobierno federal como de los gobiernos estatales. Las Universidades Públicas no son fábricas de dinero. No operan como empresas privadas.
El Subsecretario de Educación Superior, Ricardo Villanueva Lomelí, quedó atrapado en el centro de las solicitudes de recursos para el pago de aguinaldos planteadas por once Universidades Públicas, solicitudes que ya adquirieron ribetes de demandas o exigencias. Atrapadas por adeudos con el SAT, el IMSS o el ISSSTE, sin que se les reconozca la nómina de jubilados, con presupuestos bastantes reducidos que no incluyen el reconocimiento de miles de horas asignatura, etc., las Universidades necesitan urgentemente dinero para pagar los aguinaldos.
El propio Ricardo Villanueva Lomelí reconoció que, en conjunto, las instituciones pidieron en los meses se septiembre-octubre 14 mil millones de pesos para el cierre de las operaciones del 2025. Para liberar recursos, el Subsecretario exigió a las instituciones cambios administrativos y operativos, reingenierías que implican incluso recortes de personal, en algunos casos masivos, y modificaciones o construcciones de Fideicomisos Pro-Jubilación. Todas las casas de estudio han cumplido. Sin embargo, no se soltado ni un centavo a ninguna Universidad.
Queda claro entonces que el pago de los aguinaldos es una responsabilidad directa del Estado Mexicano, pero en la práctica es una responsabilidad compartida entre las universidades públicas y los gobiernos estatales/federales, aunque las Universidades son las directamente obligadas al pago por su calidad de empleadoras, sin embargo, el gobierno no ha transferido recursos para cubrir las prestaciones. La Ley Federal del Trabajo fijó el 20 de noviembre como plazo para cumplir con los trabajadores. Las Universidades están a un paso de elevar el tono de sus reclamos.
Aunque la solicitud de las Universidades fue de 14 mil millones de pesos, el presidente de la Asociación Nacional de Universidades Públicas e Instituciones de Educación Superior, Luis Armando González Plascencia, precisó que en el sector universitario existe un déficit acumulado de 50 mil 400 millones de pesos que impacta más a siete universidades públicas (de un total de once), e incluso, vaticinó que los problemas pueden agravarse porque el incremento a los presupuestos universitarios es de sólo 1.8 por ciento para el 2026.
LA “PRUEBA DE FUEGO” PARA RICARDO VILLANUEVA LOMELÍ
El pago del aguinaldo a los miles de trabajadores de las Universidades Públicas es la “prueba de fuego” para Ricardo Villanueva Lomelí. Politólogos y analistas coinciden en que el proyecto de Lomelí es la gubernatura de Jalisco o bien el rescate del estado en poder del empresario Jesús Pablo Lemus Navarro del partido Movimiento Ciudadano para transferir su control político a Morena. Quien gobierna Jalisco es el ala más radical de la Confederación Patronal de la República Mexicana que ha encontrado en el MC apoyo para postular candidatos.
Las raíces de Ricardo Villanueva Lomelí, ex Rector de la Universidad de Guadalajara, se localizan en la Federación de Estudiantes Universitarios, la cual dirigió del 2001 al 2004. En el 2015 contendió por la presidencia municipal de Guadalajara que ganó Enrique Alfaro del MC, quien después sería gobernador del estado de Jalisco. Villanueva participó en este proceso a través del PRI. El actual Subsecretario de Educación Superior de México, había forjado su carrera al amparo del llamado Grupo Universidad que pactó una alianza con Morena.
