Sinaloa, Michoacán y Chiapas concentran los mayores recursos del presupuesto federal 2026
Margarita Solano
En el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026, recientemente aprobado por la Cámara de Diputados, Sinaloa, Michoacán y Chiapas, se colocan entre las entidades que recibirán los mayores montos de recursos federales para el próximo año fiscal, de acuerdo con un análisis comparativo elaborado por La Silla Rota entre los presupuestos de 2025 y 2026.

Sinaloa tendrá un incremento significativo al pasar de 232,000 millones de pesos en 2025 a 241,400 millones en 2026, consolidándose como el estado con mayor presupuesto asignado. Le siguen Michoacán, que sube de 124,200 a 129,200 millones, y Chiapas, que pasa de 115,300 a 119,900 millones de pesos.
Estas tres entidades, que históricamente figuran entre las de mayor dependencia de las transferencias federales, concentrarán en conjunto más de 490,000 millones de pesos, lo que representa cerca del 22% del gasto federalizado total para el próximo año.

El crecimiento en Sinaloa, Michoacán y Chiapas destaca no solo por la magnitud de los montos, sino también por su concentración geográfica. Las tres entidades están entre las de mayor pobreza o conflictividad social. En el caso de Michoacán, el aumento de 5,000 millones de pesos, mientras que Chiapas, con uno de los índices más altos de marginación, mantiene un aumento sostenido desde 2022.
Por su parte, Sinaloa vuelve a encabezar la lista como receptor del mayor monto global, un hecho que sorprende dado que su población es menor que la de Jalisco o el Estado de México, ambos con asignaciones más bajas: 116,200 millones y 52,100 millones de pesos, respectivamente.
Los estados con menos recursos: Querétaro, Aguascalientes y Colima
En el otro extremo, los estados con menor asignación presupuestal son Aguascalientes (26,800 millones de pesos), Querétaro (30,600 millones) y Colima (32,000 millones), a pesar de ser entidades con crecimiento económico sostenido y menor incidencia de pobreza.
El caso de Querétaro es particularmente relevante: su presupuesto apenas crece 1,200 millones respecto al año anterior (de 29,400 a 30,600 millones), lo que representa un incremento de solo 4%. En contraste, Sinaloa, con una base más alta, registró un aumento de 9,400 millones de pesos.
Los tres estados con menor asignación total también son los que presentan mayor dinamismo industrial y menor dependencia federal. Tanto Querétaro como Aguascalientes tienen tasas de empleo formal superiores al promedio nacional y una recaudación local robusta, lo que podría explicar el bajo flujo de aportaciones.
Sin embargo, autoridades locales han advertido que los recortes o estancamientos en el gasto federalizado limitan la ejecución de obras públicas y programas sociales y castiga el éxito económico.
Colima, con apenas 32,000 millones de pesos asignados, mantiene una tendencia similar. Su presupuesto crece poco más de 1,300 millones, por debajo del promedio nacional.
La Ciudad de México y Tlaxcala, con los presupuestos más bajos per cápita
A pesar de ser el centro político y económico del país, la Ciudad de México recibirá apenas 4,300 millones de pesos, frente a 4,100 millones del año anterior, lo que la coloca con la menor asignación per cápita del país.
Esta cifra se explica porque gran parte de los ingresos de la capital proviene de recaudación local y convenios específicos, no de participaciones o aportaciones federales. Aun así, el monto resulta modesto frente al tamaño de su población y sus retos de infraestructura.
Tlaxcala también permanece en la base de la tabla con 15,600 millones de pesos, un crecimiento marginal respecto a 2025 (15,000 millones). Su pequeño territorio y baja densidad poblacional hacen que su participación en el total nacional sea mínima, aunque dependiente casi por completo de las transferencias federales.
Aumento generalizado: 85 mil millones más que en 2025
En conjunto, el gasto federalizado destinado a los gobiernos estatales y municipales pasará de 2 billones 108 mil 600 millones de pesos en 2025 a 2 billones 193 mil 700 millones en 2026, un incremento de 85 mil 100 millones, equivalente a 4% en términos reales.
Todas las entidades registran aumentos, aunque con diferencias importantes: mientras Sinaloa, Michoacán y Chiapas se ubican a la cabeza en montos absolutos, Querétaro, Aguascalientes y Colima se mantienen con los menores recursos globales.
Este crecimiento generalizado obedece a ajustes inflacionarios, actualizaciones de participaciones federales y el fortalecimiento de programas sociales y de infraestructura.
De acuerdo con el análisis comparativo de La Silla Rota, el nuevo presupuesto refuerza la tendencia de centralidad en el gasto federalizado: más dinero a los estados con mayores rezagos sociales, pero sin modificar las brechas estructurales entre norte y sur del país.
