“Videojuegos no son el enemigo” aclara diputada de MC; impuesto de 8% atiende la salud mental y emocional de la niñez: PT

José Gerardo Mejía
Con el argumento de que “nadie se convierte en narco por atrapar criaturas en Pokemon”, la diputada de Movimiento Ciudadano, Iraís Reyes, subió a la tribuna para exigir “la eliminación del absurdo impuesto del 8 % a los videojuegos violentos”.
En el atril, la emecista colocó un cartel con la leyenda: “Game over a la censura. No a los impuestos absurdos”, donde aseguró que “nadie se hace violento por jugar, ni se vuelve criminal por sobrevivir al apocalipsis en ‘The Last of Us’” e invitó a Morena, “que se dice de izquierda, a jugar esta partida con coherencia”.
“Nadie termina en la delincuencia por lanzar un ‘Fatality’ en ‘Mortal Kombat’. La ficción no produce delincuentes”, remarcó.
La emecista Reyes consideró que “el entretenimiento no genera violencia; si así fuera, países como Japón o Corea, que son en los que más videojuegos se consumen en el mundo, serían los más violentos y ocurre exactamente lo contrario en este país”.
La diputada de MC subrayó que en la realidad “la violencia que desangra a México no nace de un videojuego o de una consola, nace de un Estado que ha fallado en garantizar seguridad, justicia y paz”.
“No hay un videojuego que dispare un arma, no hay consola que secuestre, extorsione o desaparezca personas, no hay partida que destruya el tejido social”, ironizó.
Con ironía, la diputada del PAN, Amparo Lilia Olivares Castañeda, comentó que “ahora resulta que el problema de México son los refrescos, los electrolitos y los videojuegos. Entonces, no es la falta de medicinas, ni la inseguridad, ni la corrupción”.
“Así opera este gobierno. Te dice que te cuida, pero te cobra. Te promete bienestar, pero te exprime. Te habla de justicia, pero te deja sin opciones. Parece broma, pero es el reflejo de un gobierno que quiere regular todo lo que no entiende”, añadió.
Olivares Castañeda apuntó que “primero censuran los jueces, luego censuran a la prensa y ahora quieren censurar los videojuegos”.
En su intervención, la diputada del PAN María Angélica Granados Trespalacios afirmó que “el aumento al IEPS en bebidas saborizadas, tabacos, apuestas o videojuegos solamente es una medida recaudatoria disfrazada de virtud moral”.
“Aumentar impuestos no es hacer política de salud, es hacer caja para sostener programas clientelares, propaganda electoral y proyectos fallidos. Y lo más grave es que estas medidas golpean directamente a las familias, al pequeño comercio, al consumo básico y al bolsillo de quienes ya no tienen margen”, enfatizó.
Olga Lidia Herrera, diputada del Partido del Trabajo consideró que con el gravamen a los videojuegos, “atendemos también la salud mental y emocional de nuestra niñez, estableciendo medidas que regulen los videojuegos y las apuestas digitales, para prevenir adicciones, fortalecer la atención psicológica y promover valores de convivencia y, sobre todo, de respeto”.
“Porque el bienestar no solo es físico, también es emocional, es familiar y comunitario”, mencionó convencida.
Por ello, la diputada del PRI Fuensanta Guadalupe Guerrero subió a tribuna donde cuestionó el discurso falso de los videojuegos porque “Morena, asegura que con un impuesto a los se van a atender las causas del delito, se va a terminar la violencia y hasta se van a resolver las desapariciones. Eso es ingenuo”.
“En lugar de fortalecer las políticas de salud mental en las escuelas, en lugar de crear programas de cultura para la paz o de promover espacios de sano esparcimiento, ustedes deciden crear un impuesto. Pero un impuesto no disminuye la violencia ni el consumo, solo aumenta los precios y fomenta la piratería”, remachó.
En su turno, el también priista Emilio Lara se preguntó sobre los videojuegos “que ustedes consideran violentos: ¿Cuántos jóvenes en México pueden comprar ese tipo de licencias, este tipo de cartuchos?”.
“En cambio, el grueso de la población sigue consumiendo narcoseries, escuchando narcocorridos, pero con esa industria no se meten, porque ahí está su ideólogo Epigmenio Ibarra, envenenando a las juventudes”, enfatizó.
Antes de bajar de la tribuna donde dejó su cartel, Iraís Reyes, diputada de MC resaltó que “los gamers, lejos de ser una amenaza, son personas creativas y talentosas, que no necesitan castigo ni estigmas, sino, que el Estado vea en ellas innovación, no un enemigo del qué sacar dinero”.
Minutos después, el que perdió el control fue el diputado del PT, Jesús Roberto Sandoval, cuando vio el cartel de la diputada de MC en el ya tradicional “acompañamiento” al orador en turno y con rostro descompuesto lo aventó con desprecio hacia las curules, aunque no aclaró si es afecto a un “videojuego violento”.