Rocha conmemora aniversario luctuoso de Rosario y Alejo Uzárraga
El gobernador Rubén Rocha Moya asistió a la colonia 15 de Julio en Guamúchil para participar en la ceremonia del 39 aniversario luctuoso de los luchadores sociales Rosario Uzárraga Orduño, y su hijo Alejo Uzárraga Atondo, quienes fueron asesinados el 12 de enero de 1983 mientras apoyaban un movimiento social por lograr vivienda.
“No podía fallar que en mi primer año de gobierno estuviera justamente en este evento que para mí es de gran significado”, fue lo primero que dijo el gobernador Rocha frente al busto levantado en el cruce de las calles Xicoténcatl y Gabriel Leyva de sus dos amigos, con quienes compartió movimientos de lucha de la izquierda en los 70’s y 80’s.
En su mensaje ante una concurrencia en la que se encontraban las familias de ambos luchadores, el mandatario estatal afirmó que los dos eran muy valientes y durante su vida fueron hombres que se entregaron a la lucha para abatir las desigualdades sociales, por lo que los consideró de la misma valía que los próceres de la democracia de México.
Precisamente, para postergar sus ideales y su lucha para ser conocidas por las siguientes generaciones, el gobernador Rocha escribió en 1984 el libro “Tultita y cinco años de lucha popular en Guamúchil”, dedicado a sus amigos Uzárraga, del cual rememoró algunos pasajes y para su sorpresa, una señora del público, descendiente de Rosario Uzárraga le entregó el libro el cual con gusto hojeó sus ya amarillas hojas mientras continuaba con su relato.
“Lo único que quería decirles es que el libro Tultita, en la portada trae dos caídos, es un libro en honor a ellos. Vale la pena que recuperemos la valía de hombres como ellos”, dijo mientras enseñaba el libro.
“Era un mundo de injusticias que ya no debe haber, nosotros tenemos que aprender de ese pasado en el cual participamos y aquí por fortuna ya me encontré a varios amigos míos”, dijo.
Previamente, tanto el diputado local Ambrosio Chávez, quien fue contemporáneo de esos movimientos, al igual que el señor César Bojórquez y el hijo de Rosario, el señor Sergio Uzárraga Acosta, recordaron la trayectoria de ambos caídos, con anécdotas personales.
También hizo lo propio el presidente municipal de Salvador Alvarado, Armando Camacho Aguilar, quien se dio a la tarea de acondicionar la plaza donde están los bustos para realizar el evento.
Al respecto, el gobernador Rocha anunció que con recursos estatales y en reciprocidad, su gobierno pavimentará con concreto hidráulico esta calle Xicoténcatl, donde se exhiben los bustos de los Uzárraga.
También estuvieron en el presídium de la ceremonia, las señoras Dolores Acosta viuda de Uzárraga, y Martha Leticia Martínez viuda de Alejo Uzárraga; el delegado de Programas Sociales para el Bienestar, Juan de Dios Gámez Mendívil, hijo de Juan de Dios Gámez Aguilar, compañero de lucha de los Uzárraga, lo mismo que el coordinador de Asesores del gobernador, José Isabel Ibarra Valdivia.
Al término de la ceremonia y al regresar a Culiacán, por carretera a como llegó a Guamúchil, el gobernador Rocha se paró en las instalaciones de la UAS para supervisar la vacunación para el magisterio que inició este día y concluirá el viernes.