Morena, las disputas internas. Parte 2, Chiapas: Sin operación cicatriz, las facciones van por la gubernatura
Gabriela Coutiño
El proceso para designar al coordinador de la defensa de la 4T –que ganó Claudia Sheinbaum– desató en Chiapas una abierta pugna entre grupos locales de Morena.
Particularmente notorio fue el choque entre los operadores de Sheinbaum y el equipo de Adán Augusto López, quien fue apoyado por funcionarios del gobierno estatal que encabeza su cuñado Rutilio Escandón, mientras éste se mostró públicamente complacido con el triunfo de la exjefa de gobierno de la Ciudad de México.
No ha habido “operación cicatriz” para atenuar las luchas intestinas. Por el contrario, éstas se recrudecieron de cara a la definición del candidato a la gubernatura del estado. El último capítulo fue la divulgación del video del superdelegado estatal Antonio Castillejos recibiendo dinero de David León Romero, operador político de Manuel Velasco, el exgobernador de Chiapas.
Un video anterior de León, divulgado por Carlos Loret de Mola, lo mostró en una situación similar con Pío López Obrador, hermano del presidente, en una reunión que presuntamente ocurrió en 2015.
Luego del resultado de las encuestas en las que Claudia Sheinbaum se impuso a las demás “corcholatas”, “no todos están conformes con lo que sucedió”, comenta un integrante de uno de estos grupos, quien habló con la reportera a condición de mantener su anonimato.
Unas horas después del anuncio del triunfo de Sheinbaum, comenzaron a circular vía aplicaciones de teléfono y redes sociales cifras sobre supuestos resultados en Chiapas. En ellos, detrás de la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México apareció el exgobernador Manuel Velasco y en tercer lugar Marcelo Ebrard, casi empatado porcentualmente con Adán Augusto López, en cuarto.
Esos presuntos resultados, que fueron “filtrados” a la prensa –aunque los morenistas no los confirmaron ni desmintieron– fracturaron la convivencia pacífica de los grupos políticos estatales y evidenciaron el trabajo del equipo local de Sheinbaum con Antonio Santos, su representante en el estado, y José Antonio Aguilar Castillejos, el delegado de programas especiales.
Pero también afloró lo que fue visto durante estos meses de proceso por la Coordinación Nacional de la 4T: una fuerte pugna de los operadores de Sheinbaum con el equipo de Adán Augusto López, quien fue apoyado infructuosamente por una parte del gabinete estatal que encabeza su cuñado Rutilio Escandón, así como la influencia política que todavía conserva el exgobernador Velasco Coello.
El gobernador saludó la victoria de Sheinbaum viajando a la Ciudad de México y apareciendo con ella en fotos, lo que se divulgó en un boletín de prensa oficial. Días más tarde se anunció la incorporación de Adán Augusto López al equipo de Sheinbaum.
El 18 de septiembre se emitió la convocatoria para la elección de quien será el defensor o defensora de la 4T en Chiapas, en los hechos el virtual candidato o candidata a la gubernatura.
El nombramiento de Adán Augusto aviva esa pugna, pues ésta se dará con el ingrediente de la incertidumbre entre las facciones morenistas locales. Aunque en la clase política de Chiapas nadie duda del liderazgo de López Obrador, también se sabe que seguramente habrá “negociaciones” para evitar el cisma entre Rutilio –un gobernador que organizaría las elecciones y las movilizaciones– y los demás grupos, entre ellos el de otro excandidato a coordinar la defensa de la 4T, el exgobernador Manuel Velasco.
Encuesta accidentada
Desde los meses previos a la encuesta de la que surgió triunfadora Claudia Sheinbaum hubo algunos incidentes, uno de ellos uno misterioso: en la segunda semana de agosto se conoció de un robo a una casa en Tuxtla Gutiérrez. No fue un robo común, pues se trataba de las oficinas del representante de Sheinbaum en Chiapas, Antonio Santos.
La policía reportó que fue un asalto a un cuentahabiente, pero medios locales mostraron en sus redes sociales que en realidad se había efectuado un robo en el inmueble.
Otros incidentes resurgieron el miércoles 30, durante el levantamiento de la encuesta, cuando en el municipio de Pijijiapan la diputada local Faride Abud fue acusada por operadores de Sheinbaum de no respetar las reglas del proceso.
Simpatizantes de la diputada de Morena –identificada como de un grupo afín al Ejecutivo estatal Rutilio Escandón– pegaron propaganda de Sheinbaum en casas identificadas previamente como habitadas por simpatizantes de la exjefa de gobierno de la Ciudad de México.
Los reclamos a la diputada surgieron porque los vecinos nunca dieron su autorización para que se pegara propaganda en las paredes de sus viviendas y porque, de acuerdo con las reglas del proceso interno, la encuesta no sería aplicada donde hubiera este tipo de anuncios de alguno de los candidatos.
El domingo 3 de septiembre se conocieron nuevas quejas del equipo de Claudia Sheinbaum: acusaron al secretario de Salud estatal, José Manuel Cruz Castellanos, de violar el proceso interno, ya que las “brigadas de salud” estaban activas en los municipios en donde ese día se aplicarían las encuestas. Una de esas brigadas, se documentó, se encontraba activa en la Colonia San José Terán de la capital.
El secretario Cruz Castellanos está identificado como parte del equipo político de Adán Augusto López, vía su hermana Rosalinda López, administradora del SAT y esposa de Rutilio Escandón, gobernador de Chiapas.
Para ese momento, ya era evidente que los grupos políticos que conforman Morena en el estado estaban enfrentados entre sí. Pero no quedó en eso.
En la tarde noche del domingo, Carmelita de los Santos, activista de Morena que se identifica con el proyecto de Marcelo Ebrard y Pío López Obrador, representante de Ebrard en el estado, llamó a la prensa para alertar sobre un incidente.
En el oriente de la capital, simpatizantes de Marcelo Ebrard retuvieron un automóvil en el que viajaban dos personas con paquetería de la encuesta. Hasta el lugar de la retención llegó incluso un notario público.
Una de las personas retenidas fue identificada como funcionaria del gobierno municipal de Arriaga, pero también como simpatizante del grupo de Sheinbaum.
Aunque al cierre de la edición no se había esclarecido este hecho, el equipo de Sheinbaum en Chiapas rápidamente se desmarcó del hecho. Para el equipo de Ebrard, sin embargo, la cadena de custodia de las encuestas estaba rota.
Definiciones y desacuerdos
En Chiapas, Morena ya cuenta con candidatos y candidatas para la defensa estatal de la cuarta transformación. De acuerdo con la convocatoria, todavía faltan los designados por el consejo nacional. De momento, los que competirán son la senadora Sasil de León Villard, la alcaldesa de Tapachula Rosa Irene Urbina, José Manuel Cruz Castellanos, secretario de salud, y José Antonio Castillejos, delegado de programas federales.
Fuera quedaron –“por lo pronto”, dicen sus respectivos equipos de trabajo, pues falta lo que diga el consejo nacional– el Senador Eduardo Ramírez Aguilar y Carlos Morales Vázquez, actual alcalde de Tuxtla Gutiérrez, por mencionar los que más figuran mediáticamente.
También quedaron fuera el empresario Marden Camacho, quien era el coordinador estatal de la campaña de Adán Augusto López en el estado y la empresaria Patricia Armendáriz, que había levantado la mano y esperaba figurar en la encuesta.
El alcalde tuxtleco presentó su segundo informe de gobierno y anunció su licencia temporal al cargo para buscar la coordinación estatal de la 4T. Antes, también renunció a su cargo el superdelegado en Chiapas, José Antonio Aguilar Castillejos, el miércoles 27 de septiembre. Al otro día en Latinus apareció el video en donde David León, el operador de Manuel Velasco Coello, le entrega dinero.
Varios de estos personajes forman parte o encabezan grupos políticos que en Chiapas se integraron desde el inicio del gobierno de la 4T, mientras que otros se fueron forjado a partir del proceso sucesorio, comenta el profesor universitario y doctor en Economía Jorge López Arévalo.
El académico dice: “A mayor pobreza, democracia de baja intensidad”. En sentido tal parece que “a Chiapas no llegó ninguna transformación”, pues, señala, “son las mismas prácticas con los mismos actores que se cambiaron de camiseta”.
Prosigue: “los grupos chiapanecos se dan con todo, las diferencias entre ellos incluso son públicas. Ante una figura tan fuerte como la de López Obrador, no espero que ocurra un cisma pero eso no evitará que la guerra entre unos y otros arrecie. Se incrementará”.
López Arévalo hace el recuento de estos grupos, que convivían hasta la apertura del ejercicio de las “asambleas informativas” para posicionar a las “corcholatas” nacionales.
Uno de los primeros que se consolidó fue el denominado “Grupo Tabasco”; a él pertenecen los secretarios de Obras Públicas, Ángel Torres Culebro, y de Salud, José Manuel Cruz Castellanos. Son funcionarios nacidos en Chiapas, pero que realizaron trabajo administrativo en Tabasco. La carrera política y administrativa de ambos está ligada a Rosalinda López, hermana del exsecretario de gobernación y “corcholata” Adán Augusto López.
Otro grupo es el de los funcionarios federales. Ellos tienen el cobijo del ahora ex superdelegado José Antonio Aguilar Castillejos, quien suma a sus filas a Marcelo Toledo, diputado local y uno de los fundadores de Morena, así como al diputado federal Ciro Sales. Suma también a algunos alcaldes como el de Pijijiapan, Carlos Alberto Albores Lima, y la de Arriaga, Yolanda Alonso de los Santos, cuyo esposo es el delegado de los programas especiales en esa zona.
Un tercer grupo es el conformado por el resto del gabinete estatal, que responde a Rutilio Escandón. El más visible es el secretario de Hacienda, Javier Jiménez Jiménez, quien, al igual que los miembros del Grupo Tabasco, promueve su imagen en bardas en busca de un cargo de elección popular.
En cuanto a Pío López Obrador, hermano del presidente, no estaba identificado con algún grupo político estatal. Sin embargo, realizó un gran activismo al operar para que los alcaldes de partidos distintos a Morena renunciaran a su militancia y engrosaran las filas del movimiento, hasta que en agosto de 2020 el escándalo de los videos que se difundieron en los cuales apareció con el exdirector de Protección Civil del gobierno federal, David León (presuntamente hechos en 2015), lo lanzaron al ostracismo político.
Pío López Obrador reapareció en la actual coyuntura de la irrupción de las “corcholatas” y el proceso sucesorio, haciendo promoción de Marcelo Ebrard.
También hay un grupo que se puede identificar como “independiente”, conformado por quienes se dicen amigos cercanos del presidente. Entre ellos se encuentran el presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, Carlos Morales Vázquez y su hermano Plácido Morales Vázquez, presidente del Tribunal Federal de Justicia Administrativa.
El Partido Verde Ecologista de México puede considerarse un grupo político más que orbita alrededor del presidente López Obrador y que se mantiene con el liderazgo del exgobernador Velasco Coello. En ese contexto apareció otra corriente: la de Claudia Sheinbaum, representada por su colaborador en el gobierno de la Ciudad de México Antonio Santos.
Mientras, el círculo político del director general del IMSS, Zoé Robledo, hoy se ve en desventura al descarrilarse el proyecto por decisión del presidente. Pero se ha compactado en torno a la figura del alcalde de Tuxtla Gutiérrez y de la diputada federal Manuela Obrador, de quien se pronostica que llegará al Senado.
Ante la próxima definición del candidato o candidata a la gubernatura, los prestidigitadores de la política chiapaneca hacen sus apuestas y en algo coinciden: será decisión de López Obrador.