¿Diputados corruptos ¿Usted qué cree?

José Luis López Duarte

Para todos quienes leen estas líneas, un grano de arena en el desierto, los saludo y los abrazo después de este breve receso.
En uno de estos días tuve una larga conversación con un estimado amigo sobre el transcurrir de la vida política sinaloense, particularmente de los cinco años de gobierno de Quirino Ordaz Coppel y el primero de Rubén Rocha, donde vemos una transición política con un reacomodo de fuerzas totalmente en la dirección del PRI, en la que lo más sobresaliente es el pragmatismo, el oportunismo, la ausencia de congruencia y una vulgaridad de mentir sin el menor rubor que raya en el cinismo.
Y todo surgió a partir de comentar la nota de nuestro amigo Ángel García, que publica semanalmente por Facebook sobre el “Acuario Mar de Cortez”, donde denuncia lo que considera otro gran negocio privado con recursos púbicos y “la tajada del león” para el empresario al que se le otorgó la concesión, el primo del entonces gobernador, Ernesto Coppel, que tendrá la concesión por 28 años, que del costo de la inversión de mil 467 millones de pesos, 583 millones aportó el gobierno del estado, 586 millones aportó el gobierno federal y el inversionista privado puso 378 millones, con los que adquiere el “derecho” de usufructuar el 96 por ciento de los ingresos totales y el otro 4 por ciento serán para el ayuntamiento.
No hay explicación alguna, digo explicación coherente, legal y sostenible social y económicamente ¿Cómo se explica que alguien que invierte el 26 por ciento del total de la inversión le toque el 96 por ciento de los ingresos?
Y peor aún, cuando se denuncia por Ángel García Contreras la apropiación del humedal Laguna del Camarón, donde se construyó lo que era un espacio de disfrute social abierto a lo que se suma el costo que tuvo la gran inversión de la avenida que le dio acceso al lugar.
Imagine usted, si el tiburonario del gobierno de Mazatlán, el 2021 ingresaron 600 mil visitantes y el 2022 800 mil, por lo que se calcula que fácilmente el 2023 rebasará el acuario Mar de Cortez el millón de visitante, por lo que ingresará a las arcas del nuevo dueño la suma de 300 millones de pesos al año, si se considera a 300 pesos el ingreso por persona al nuevo acuario.
Y para rematar, es obvio que se trata de una obra de Asociación Público Privada (APP) que por ley deben aprobar los diputados y por mayoría calificada, cosa que no se hizo ¿Por qué?
Ya entrados revisamos el caso del estadio de futbol de Mazatlán, otro monumento también al desvío, la opacidad y la complicidad de los diputados, cuando se invirtieron 700 millones de pesos de recursos públicos y el congreso del estado no hizo nada, mediante un contrato del dueño de TV AZTECA y del equipo de futbol, Ricardo Salinas Pliego, con el municipio de Mazatlán, cuando también es una APP.
Por lo que nos preguntamos ¿Qué ha pasado con los diputados de MORENA? ¿Cuándo cambiaron de bando y se incluyeron en el grupo de poder que venía gobernando Sinaloa?
A lo que mi amigo me respondió “es que han cambiado las condiciones” ¿Cuáles? – le pregunté – “pues necesita aliados” me dijo “los que sean” le contesté.
Cosa que considero fatal para un gobierno que quiso ser distinto y pasa a ser igual o peor con un grupo de diputados abrazados con el PRI, para proteger las espaldas del gobierno anterior, cubrir sus deudas, tapar sus desvíos y hacerle el teatro al coordinador de MORENA en aras de justificarse. Como se extraña a la diputada Graciela Domínguez Nava… ella si arremangaba.