Farmacias del noroeste de México venden píldoras con metanfetamina y fentanilo
Isaac Norris
Las farmacias de varias ciudades del noroeste de México están vendiendo medicamentos falsos mezclados con drogas letales como metanfetamina y fentanilo, lo que indica que la expansión del mercado de drogas sintéticas está poniendo en riesgo a clientes desprevenidos.
El informe, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y corroborado por una investigación similar de Los Angeles Times, halló que las píldoras falsificadas se comercializan como sustancias de venta controlada como Oxicodona, Percocet o Adderall.
El equipo de UCLA descubrió que las sustancias de venta controlada falsas se podían conseguir sin fórmula médica en dos tercios de las 40 farmacias visitadas en cuatro ciudades del noroeste de México, incluidos destinos turísticos como Tijuana y Cabo San Lucas. Debido al precio de los medicamentos, estos eran comprados sobre todo por turistas estadounidenses.
Las píldoras que contenían fentanilo, heroína y metanfetamina se podían adquirir en más de 10 farmacias. De las 45 muestras tomadas, nueve píldoras vendidas como Adderall dieron positivo para metanfetamina y ocho vendidas como Oxicodona contenían fentanilo. Otras tres píldoras vendidas como Oxicodona contenían heroína.
“Las farmacias que distribuían medicamentos falsos estaban ubicadas en vecindarios pequeños en donde se atiende a turistas, y generalmente tenían anuncios en inglés”, señala el informe.
Por mucho tiempo, los estadounidenses han comprado medicinas en farmacias de ciudades fronterizas mexicanas, con el fin de ahorrar dinero. Sin embargo, es muy difícil diferenciar los medicamentos legítimos de los ilegítimos, por lo que muchos clientes están comprando medicamentos contaminados sin darse cuenta, como señala el informe.
Si bien aún no está claro de qué manera las farmacias están obteniendo píldoras falsificadas mezcladas con sustancias ilegales, los posibles proveedores podrían ser los grupos productores de drogas en el lado mexicano de la frontera, debido a la extensión y el poder que ostentan dichos grupos.