Elección de una mujer como presidenta de la Suprema Corte es un hecho histórico: Gonzalo Armienta
Como un hecho histórico, catalogó el doctor en derecho constitucional, Gonzalo Armienta Hernández, la elección de la doctora Norma Lucía Piña Hernández como ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y del Consejo de la Judicatura Federal para el periodo 2023-2026
Al margen de los acontecimientos previos en los cuales se puso en duda la honorabilidad de la también ministra Yasmín Esquivel, quien también aspiraba a suceder en el cargo al ministro Arturo Saldívar, el académico e investigador de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
“Es un hecho histórico que se haya designado como presidenta de la Suprema Corte a una mujer, primera mujer que ocupa ese importantísimo cargo porque debemos entender que la presidente de la Suprema Corte tiene el mismo nivel que el Presidente de la República y que también el líder del Congreso de la Unión”, externó.
Armenta Hernández recordó que, hasta hace no muchos años, la Suprema Corte de Justicia no tenía mujeres como ministros, sin embargo, esos paradigmas se han ido rompiendo y ahora, aunque hay menos mujeres de todas maneras las cosas han venido cambiando y eso es un hecho trascedente que se ha publicitado mucho en los medios.
En cuanto a las características de la nueva presidente de la Suprema Corte, el jurista universitario destacó el hecho que no es la línea del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, lo cual garantiza que se tendrá una división de poderes.
Entre las resoluciones en las cuales participó como ministra la doctora Norma Lucía Piña Hernández, mencionó el voto a favor de la despenalización del aborto y su postura en contra de la prisión preventiva oficiosa.
“Son temas espinosos en lo que la ministra (Norma Lucia Peña Hernández) ha estado en contra de las decisiones de López Obrador”, anotó.
El exdirector de la Facultad de Derecho de la UAS puntualizó que independientemente de la resolución final, el tema del plagio de la tesis le afectó a la ministra Yasmín Esquivel, quien aspiraba a la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por el desprestigio del cual fue objeto.