Las cuentas pendientes de la UNAM: irregularidades por 8.1 millones de pesos
Nancy Flores
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) tiene cuentas pendientes con la Auditoría Superior de la Federación: aún no comprueba el uso legal de más de 8 millones 100 mil pesos correspondientes a los ejercicios 2017, 2018 y 2019. Las irregularidades son por pagos indebidos en las construcciones de las escuelas en Mérida y Juriquilla, en seguros de vida para el personal universitario, en estímulos para académicos de asignatura y en la impresión de la Gaceta UNAM
Irregularidades por 8 millones 178 mil pesos forman parte de las cuentas pendientes que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) tiene ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF): a la fecha, no ha podido comprobar que usó legalmente ese recurso millonario en los ejercicios 2017, 2018 y 2019, para la construcción de dos escuelas, la contratación de seguros de vida, el pago de estímulos y la impresión de la Gaceta.
De acuerdo con el máximo órgano de fiscalización del país, las anomalías más importantes en términos económicos fueron en las edificaciones de las Escuelas Nacionales de Estudios Superiores en Mérida, Yucatán; y Juriquilla, Querétaro: en conjunto, el desfalco suma 4 millones 298 mil 857 pesos; es decir, más del 50 por ciento del total que aún no comprueba.
Las otras anomalías tienen que ver con pagos en exceso a las empresas La Latinoamericana, SA, por la contratación de seguros de vida para el personal universitario (y cuya irregularidad asciende a 1 millón 468 mil 752 pesos); y La Crónica Diaria, SA de CV, por la impresión de la Gaceta UNAM (con anomalías por 1 millón 96 mil 234 pesos); así como el otorgamiento indebido de estímulos a 528 académicos de asignatura (con un monto observado de 1 millón 314 mil 301 pesos).
El caso de la Escuela en Mérida
La construcción de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES), Unidad Mérida, es en la que la ASF detectó las irregularidades más onerosas: las tres observaciones que hizo en las Cuentas Públicas 2018 y 2019 suman 3 millones 559 mil 50 mil pesos. A la fecha, la Universidad no ha podido demostrar que el uso de esos recursos públicos fue legal.
La observación más importante “presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública federal por 2 millones 715 mil 918.75 pesos, por pagos indebidos por diferencias entre los volúmenes de obra estimados y pagados y los realmente ejecutados, más los rendimientos financieros generados hasta la fecha de su recuperación en el contrato de obra a precios unitarios y tiempo determinado número 771.01.17.057.CN.CO.621.19.0173”.
De acuerdo con la Auditoría de cumplimiento a inversiones físicas: 2019-4-99A3Q-22-0123-2020, dicha contratación tuvo por objeto realizar “trabajos de albañilería, acabados, cancelería, instalaciones eléctricas, hidrosanitarias, aire acondicionado y especiales para la construcción de la segunda etapa del edificio de operación e infraestructura”.
El contrato se firmó con las empresas Ingeniería, Obras y Servicios a la Industria, SA de CV; y Coninsur, SA de CV, el 15 de abril de 2019, con vigencia a partir de esa fecha y hasta el 8 de agosto de ese año. El monto original ascendió a 10 millones 34.5 mil pesos.
Según la Auditoría, la causa raíz probable de la irregularidad fue la “inadecuada supervisión y control de obra” por parte de las autoridades universitarias. Mientras que los pagos en exceso por más de 2.7 millones de pesos se dieron en incumplimiento del artículo 66, fracciones I y III del Reglamento de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y de los numerales 1.3.3, fracción IV, y 1.10.3 de los Lineamientos para la Administración de Contratos de la Universidad Nacional Autónoma de México.
La misma auditoría determinó un segundo daño patrimonial por 536 mil 891.86 pesos, “por pagos indebidos por diferencias entre los volúmenes de obra estimados y pagados y los realmente ejecutados, más los rendimientos financieros generados hasta la fecha de su recuperación, integrados en el contrato número 771.01.17.057.CN.CO.621.18.0813”.
En este caso los trabajos fueron contratados con la empresa Valto Tecnología, SA de CV, para la construcción de la segunda etapa del edificio de docencia B. La causa raíz probable de la irregularidad por más de medio millón de pesos fue la misma: inadecuada supervisión y control de obra.
La tercera observación correspondió a la Cuenta Pública 2018, como parte de la Auditoría de cumplimiento a inversiones físicas: 2018-4-99A3Q-22-0139-2019. En ésta “se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública federal por 306 mil 240 pesos, por pagos indebidos en la orden de trabajo 771.01.17.057.CN.OT.621.18.0184, de fecha 9 de abril de 2018”. El monto corresponde al ciento por ciento del pago de esa contratación.
Dicho contrato benefició a la empresa ACSV Grupo Consultor Internacional, SC, y tuvo como objetivo “el desarrollo e integración de los términos de referencia para permitir a la Dirección General de Obras y Conservación de la UNAM sustentar y fundamentar la excepción de la licitación pública, para adjudicar de manera directa las obras y servicios para la construcción de la ENES Mérida” (edificios de docencia A y B, edificio de gobierno, edificio multifuncional y el edificio de operación e infraestructura).
Este servicio de consultoría buscaba justificar legalmente la adjudicación directa de todos los contratos para la construcción de cimentación, obra civil, obras exteriores, fabricación y montaje de estructura metálica y de precolados, e incluso la gerencia de proyecto y la coordinación y verificación de las obras y servicios relacionados.
No obstante, la ASF determinó que “no se acreditaron los entregables de dicha orden de trabajo, correspondientes a cuatro contratos de obras y servicios, los cuales se formalizaron el 22 de marzo de 2018, es decir, antes de la formalización de la orden de trabajo observada por lo que no se justifica dicha contratación, y en consecuencia se considera indebido el pago efectuado, en incumplimiento del Reglamento de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, artículo 66, fracciones I y III”.
Respecto de la causa raíz probable de la irregularidad, apunta que es los “pagos improcedentes por la indebida formalización de una orden de trabajo, la cual no justificó el motivo de su contratación”.
Caso de Juriquilla
En la construcción de la ENES Juriquilla, Querétaro, la Auditoría de cumplimiento a inversiones físicas: 2019-4-99A3Q-22-0122-2020 determinó que hubo un probable daño patrimonial por 518 mil 310.84 pesos, “por pagos indebidos por diferencias entre los volúmenes de obra estimados y pagados y los realmente ejecutados, más los rendimientos financieros generados desde la fecha de su pago hasta la de su recuperación”.
Los cinco contratos implicados fueron: 771.01.16.057.CN.CO.621.19.0430, asignado a la empresa Constructora de Espacios Industriales y Habitacionales, SA de CV, para el “escurrimiento de las aguas pluviales en las vialidades del circuito interior del campus, consistente en la realización de bocas de tormenta y separación de los drenajes interconectados de las aguas pluviales y aguas residuales de los edificios”; 771.01.16.057.CN.CO.621.19.0556, a favor de Edur de México, SA de CV, para la “fabricación y montaje de elementos arquitectónicos para confinar las áreas exteriores de los edificios 3, 4, 5 y 6 del estacionamiento adyacente al campus Juriquilla; 771.01.16.057.CN.CO.621.19.0230, firmado con Servicios Generales para la Construcción, SA de CV, para la “construcción de dos pozos de absorción para los edificios 4 y 5”; 771.01.16.057.CN.CO.621.19.0520, asignado a Construnaica, SA de CV, para el suministro, instalación, pruebas y puesta en trabajos para la elaboración de pisos de concreto, ecocreto y jardinería en áreas exteriores de acceso al edificio 5”; 771.01.16.057.CN.CO.621.19.0524, que favoreció a Proyectos Metropolitanos, SA de CV, para los “trabajos de carpintería en aulas, laboratorios y servicios escolares, para la construcción del edificio 5”.
En esta misma obra, la Auditoría Superior ya había determinado –en la Cuenta Pública 2018– también un probable daño o perjuicio a la Hacienda Pública federal por 221 mil 514.27 pesos, por diferencias entre los volúmenes de obra estimados y pagados y los realmente ejecutados. Los contratos involucrados fueron: 771.01.16.057.CN.CO.621.18.0466, 771.01.16.057.CN.CO.621.18.0421 y 771.01.16.057.CN.CO.621.18.0466.
Seguro de vida
Además de esas obras, la UNAM no ha podido comprobar el uso legal de recursos públicos en la contratación de seguros de vida. Al respecto, en la revisión a la Cuenta Pública 2018, la Auditoría Superior de la Federación detectó un probable daño patrimonial por 1 millón 468 mil 752.34 pesos. Ello, “por el pago en exceso y sin que se haya formalizado convenio modificatorio alguno del contrato 47249-65-12-I-17, suscrito con la aseguradora La Latinoamericana, SA”. La Dirección General de Personal no acreditó la formalización de convenios modificatorios del monto, lo que contraviene la ley.
El contrato se formalizó el 10 de octubre de 2016 –con del 31 de diciembre de ese año al 31 de diciembre de 2018– por 58 millones 390.4 mil pesos, para el seguro de vida de los trabajadores académicos integrantes de la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM. No obstante, al final la institución pagó 59 millones 859.1 mil pesos, generando un sobrecosto indebido de 1 millón 468.7 mil pesos.
Como “justificación”, la Dirección General de Personal dijo a los auditores federales que no se celebran convenios modificatorios por la naturaleza del servicio, porque supuestamente “no se trata de un incremento sino de un ajuste en los asegurados”.
Estímulos a académicos
Otro rubro en el cual la Universidad tiene cuentas pendientes es el de los estímulos académicos. Al respecto, la Auditoría de cumplimiento financiero: 2017-4-99A3Q-15-0178-2018 observó un presunto daño patrimonial por 1 millón 314 mil 301 pesos correspondiente al otorgamiento de estímulos adicionales a 528 académicos, mismos que no correspondieron a los montos establecidos en los tabuladores de las convocatorias del Programa de Estímulos a la Productividad y al Rendimiento del Personal Académico de Asignatura (Pepasig).
“En el comparativo de los montos otorgados de acuerdo con el número de horas laboradas y el grado de estudios del académico, contra los tabuladores establecidos en las convocatorias, se identificó que se otorgaron estímulos a 528 académicos, los cuales no corresponden a los montos de los tabuladores de las convocatorias del Programa, por lo que se determinaron pagos adicionales por 1 millón 314.3 mil pesos”, advierte el análisis de la ASF.
De acuerdo con el informe, en 2017, la UNAM ejerció 20 millones 324.9 mil pesos en la partida 351 “Estímulos a la productividad y al rendimiento del personal académico de asignatura y de fomento a la docencia para el personal de carrera”, de la cual se desprende el Pepasig. Este último tiene como objetivo “estimular el desempeño de los profesores de asignatura de la UNAM que hayan realizado una labor sobresaliente, así como elevar el nivel de productividad y calidad del ejercicio académico”.
El Pepasig está dirigido a académicos de asignatura sin nombramiento de profesor o investigador de carrera y con un año de antigüedad y a técnicos académicos con actividad docente frente a grupo, que son quienes menos ingresos perciben.
Gaceta UNAM
Otro presunto quebranto patrimonial que la UNAM no ha podido solventar se registró en la Cuenta Pública de 2018, con el servicio de impresión de la Gaceta UNAM, por 1 millón 96 mil 234.61 pesos. Al respecto, la ASF determinó que hubo “un pago en exceso al monto pactado en el convenio modificatorio al contrato número DGAJ-DPI-40-020318-159, formalizado con el proveedor La Crónica Diaria, SA de CV”.
Para los auditores, la Dirección General de Comunicación Social gestionó y autorizó pagos superiores al monto pactado en el convenio modificatorio formalizado, en incumplimiento del numeral 5.6.1 de la Normatividad de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El contrato DGAJ-DPI-40-020318-159 tuvo una vigencia del 1 de marzo al 31 de diciembre de 2018, con un costo de 8 millones 880.7 mil pesos. No obstante, se firmó un convenio modificatorio que elevó el monto a 9 millones 576.1 mil pesos. Al revisar 142 facturas emitidas por el proveedor, los auditores constataron “que se efectuaron cobros por conceptos de ‘color adicional’ e ‘impresión de páginas adicionales’, por 2 millones 534.4 mil pesos, partidas o conceptos que no están contemplados en el contrato”.
Así, la ASF indicó que el monto total ejercido fue de 10 millones 672.3 mil pesos, lo que significó pagos en exceso por 1 millón 96.2 mil pesos. Al respecto, la Dirección General de Comunicación Social de la Universidad intentó “justificar” este gasto con el argumento de que, por la dinámica de trabajo en la Gaceta –que es el órgano informativo oficial de la UNAM–, “no es posible una programación lineal del tiraje, tanto en número de páginas, colores y ejemplares para la distribución”.
Con información de Contralínea