El impacto de la fructosa en el cáncer: científicos revelan cómo ‘alimenta’ a un tumor
Sofía Arias Martínez
Una investigación de la Universidad de Washington en San Luis encontró la relación entre el consumo de fructosa y el crecimiento de tumores. De acuerdo con los hallazgos del estudio científico, podría promover el crecimiento tumoral en modelos animales de melanoma, cáncer de mama y cáncer de cuello uterino.
El estudio fue publicado el pasado 4 de diciembre en el diario científico ‘Nature’. Debido a que el consumo de este tipo de azúcar ha aumentado por el uso generalizado de jarabe de maíz con alto contenido de fructosa como edulcorante en bebidas y alimentos ultraprocesados, los investigadores decidieron investigar la teoría de que podría ser el combustible para el crecimiento de algunos tumores.
No obstante, encontraron que la fructosa no alimenta directamente los tumores. Por el contrario, los científicos descubrieron que el hígado convierte la fructosa en nutrientes utilizables para las células cancerosas.
“Aquí mostramos que la suplementación con fructosa mejora el crecimiento tumoral en modelos animales de melanoma, cáncer de mama y cáncer de cuello uterino sin provocar aumento de peso ni resistencia a la insulina”, anotaron en el informe.
¿Cómo los hallazgos podrían ayudar a los tratamientos para el cáncer?
“La idea de que se pueda combatir el cáncer con dieta es intrigante. Cuando pensamos en los tumores, tendemos a centrarnos en los componentes dietéticos que consumen directamente. Pones algo en tu cuerpo y luego imaginas que el tumor lo absorbe. Pero los humanos son complejos. Lo que pones en tu cuerpo puede ser consumido por el tejido sano y luego convertido en otra cosa que los tumores utilizan“, explicó Gary Patti, uno de los investigadores.
De acuerdo con nutricionistas de ‘My Food Data’, los alimentos más ricos en fructosa son:
- Jugos de fruta, en especial el jugo de uva.
- Gaseosas azucaradas.
- Frutas deshidratadas.
- Peras.
- Miel.
- Yogur de frutas endulzado.
- Pie de manzana.
- Hamburguesas.
- Salsas.
- Aderezos para ensaladas.
“Si revisas tu despensa y buscas artículos que contienen jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, que es la forma más común de fructosa, es bastante sorprendente. Casi todo lo tiene. No se trata solo de dulces y pasteles, sino también de alimentos como salsa para pasta, aderezos para ensaladas y ketchup. A menos que busques evitarlo activamente, probablemente sea parte de tu dieta“, agregó Patti.