La Secretaría de Hacienda y Crédito Público entrega el Paquete Económico 2025 al H. Congreso de la Unión
- El Paquete Económico 2025 establece un marco sólido para promover un desarrollo económico con justicia social y bienestar, garantizando los derechos fundamentales de la población en un entorno de finanzas públicas sostenibles.
- Se proyecta un crecimiento económico para México de entre 2 y 3% en 2025, respaldado por un mercado laboral sólido, un consumo privado robusto y niveles elevados de inversión pública y privada, con un enfoque en la inclusión regional.
- El presupuesto 2025 es muestra del compromiso del Gobierno de México con una gestión responsable y prudente de las finanzas públicas. En este contexto, se espera el inicio de una consolidación fiscal mediante una reducción del déficit presupuestario, pasando de 5% del PIB en 2024 a 3.2% en 2025, lo que permitirá mantener la deuda pública en un nivel sostenible de 51.4% del PIB.
- Se garantizará la asignación de recursos suficientes para programas sociales que beneficien a la población de menores ingresos, promoviendo su bienestar y contribuyendo así a un crecimiento más equitativo.
- El financiamiento del desarrollo se verá fortalecido con medidas tributarias basadas en la digitalización y la simplificación administrativa, enfocadas en combatir la evasión fiscal sin necesidad de crear nuevos impuestos ni aumentar la carga tributaria. Esto promoverá un sistema fiscal más equitativo y eficiente.
Resumen ejecutivo
En un contexto global de crecimiento estabilizado hacia finales de 2024, se destaca la fortaleza de la economía de Estados Unidos y una continua disminución de la inflación mundial, impulsada por la reducción de los choques de oferta. Este entorno favorable permitirá a los bancos centrales de las principales economías avanzar en ciclos de recortes de tasas de política monetaria, creando condiciones propicias para una mayor actividad económica.
Para México, se proyecta un cierre de año con una sólida trayectoria de crecimiento, apoyada por la fortaleza de la demanda interna, impulsada por un mercado laboral dinámico y un consumo privado robustecido gracias a programas sociales efectivos. Además, el aumento de la inversión privada y la ejecución de proyectos estratégicos de infraestructura pública han contribuido a este desempeño positivo.
En 2025, se espera que los impulsores de crecimiento consolidados en los últimos años permitan un desarrollo diversificado y sostenible. La economía mexicana continuará beneficiándose de una demanda interna vigorosa, altos niveles de inversión estratégica y una mayor integración regional. Este entorno también facilitará la relocalización de empresas y atraerá flujos récord de Inversión Extranjera Directa en sectores clave como tecnología, manufactura y logística. Bajo estas condiciones, se estima que el crecimiento económico de México se sitúe en un rango de 2 a 3% real anual, en línea con las previsiones del Paquete Económico 2024.
En términos macroeconómicos, se prevé que la inflación siga descendiendo, alcanzando 3.5% al cierre de 2025, dentro del rango objetivo del Banco de México. El tipo de cambio promedio se proyecta en 18.7 pesos por dólar, reflejando la resiliencia estructural de la economía nacional y su capacidad de adaptación a choques externos.
En cuanto a las finanzas públicas, se propone una gestión fiscal responsable que mantenga un déficit moderado y una deuda estable, comparativamente favorable respecto a otras economías emergentes de América Latina. Se anticipa una reducción del déficit presupuestario de 5.0% del PIB en 2024 a 3.2% en 2025, lo cual permitirá que la deuda pública se mantenga en un nivel sostenible de 51.4% del PIB. Esta estabilidad es fundamental para reforzar la confianza en la gestión fiscal del país.
La Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación busca fortalecer la recaudación mediante la digitalización fiscal, contribuyendo al combate a la evasión y a la simplificación de procesos administrativos. Se prevé que los ingresos tributarios alcancen un nivel de 14.6% del PIB en 2025, mientras que los ingresos petroleros y no tributarios continuarán aportando de manera positiva a las finanzas públicas.
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación enfatiza la aplicación de criterios de austeridad, eficacia y transparencia en el gasto público. Se planifica una inversión sólida en proyectos de infraestructura que impulsarán el crecimiento económico de forma inmediata y generarán beneficios a largo plazo. Además, se destinarán recursos para ampliar la cobertura de los Programas para el Bienestar, garantizando el respeto a los derechos constitucionales y mejorando la calidad de vida de la población.