Consolidación fiscal, la petición del FMI al gobierno de Sheinbaum
Diego Joaquín Hernández
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó a México incluir un plan de consolidación fiscal creíble en su proyecto de presupuesto de egresos para 2025, con el objetivo de mantener la sostenibilidad en las finanzas públicas del país. Esta solicitud se realizó en el informe de Perspectivas Regionales del Hemisferio Occidental, divulgado recientemente por el organismo financiero.
Después de registrar un crecimiento sólido en 2023, el FMI advirtió que la actividad económica mexicana ha mostrado signos de desaceleración en los últimos trimestres. En su análisis, el organismo mencionó que aunque las finanzas públicas en América Latina han soportado relativamente bien el impacto de la pandemia, persiste el riesgo de una deuda pública elevada en ausencia de un adecuado plan de consolidación fiscal.
El FMI enfatizó la necesidad de una estrategia fiscal que priorice ingresos dirigidos al crecimiento y que promueva la inversión a mediano y largo plazo. “Implementar la consolidación fiscal requerirá mayor disciplina en los ingresos y estabilidad en los gastos fiscales”, señaló el informe. Según el FMI, este tipo de medidas contribuirá a reducir la inflación y a mantener una estabilidad económica más sólida.
FMI baja pronóstico para México en 2024
El pasado 22 de octubre, el FMI alertó que la economía de México se ha ralentizado, al pronosticar ahora un crecimiento del 1.5% para 2024, siete décimas por debajo del 2.2% que calculaba en sus previsiones del mes de julio pasado.
Estas nuevas previsiones del FMI, que forman parte de su informe de Perspectivas Económicas Globales (WEO, por sus iniciales en inglés), también reducen, en este caso en tres décimas, el crecimiento previsto para el PIB de México en 2025, hasta situarlo en el 1.3 %.
El organismo recomendó al gobierno de Claudia Sheinbaum, que tomó posesión de su cargo el pasado 1 de octubre, una estrategia fiscal a medio plazo para reducir el déficit y la deuda, incrementar los ingresos tributarios y crear espacio fiscal para inversiones en capital humano y físico.
También sugirió aprovechar el fenómeno de la relocalización de cadenas de valor o nearhsoring.
Sin embargo, alertó de que las recientes reformas judiciales, que instauran la elección popular de los jueces y la Suprema Corte a partir de 2025, crean “importantes incertidumbres sobre la efectividad del cumplimiento de contratos y la predictibilidad del Estado de derecho”.
El informe del FMI también abordó los desafíos de inflación en México, previendo una tasa de 3% a finales de 2025. A pesar de una ligera disminución en la inflación subyacente, el FMI recomendó continuar con políticas monetarias prudentes y proyectó una inflación general de 4.69% para la primera mitad del próximo año, lo que representará un reto para la estabilidad económica.
Fomento a la Inversión
El FMI subrayó la importancia de reorientar los ingresos del gobierno hacia la inversión pública para fomentar un crecimiento sostenible. El organismo sugirió que México debe priorizar el impulso de la infraestructura y la productividad como una estrategia clave para fortalecer su economía y mejorar el bienestar social a largo plazo.
Ante un panorama económico complejo, las recomendaciones del FMI buscan asegurar una gestión fiscal responsable que permita a México enfrentar posibles desafíos económicos y mantener una estabilidad que beneficie tanto a sus finanzas como a su crecimiento económico.
Consolidación fiscal, lo que piden banqueros a Sheinbaum
El pasado mes de marzo, la Asociación de Bancos de México (ABM) ha señalado la necesidad de llevar a cabo una consolidación fiscal después del gasto extraordinario que el Gobierno federal destinó a diversos programas y obras de infraestructura. Alberto Gómez Alcalá, presidente ejecutivo de la ABM, expresó durante la 87 Convención Bancaria que existe consenso en la importancia de esta consolidación fiscal, aunque puede haber discusión sobre su alcance.
Según Gómez Alcalá, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anticipa en los Precriterios Generales de Política Económica un esfuerzo de reducción del gasto, lo que sugiere un proceso de consolidación fiscal en el próximo año. Además, Julio Carranza, presidente de la ABM, coincidió en la importancia de este proceso y destacó los retos que enfrenta el país hacia adelante.
La consolidación fiscal es una figura jurídica que puede resultar atractiva para muchas empresas, según explica la firma de abogados Ibáñez y Ferrandis. Esta práctica consiste en que varias sociedades que forman parte del mismo grupo societario , o grupo fiscal, tributen de manera conjunta. En lugar de que cada una de las empresas pague sus impuestos de forma independiente, el grupo fiscal tributa por la suma de las bases imponibles de todas las empresas que lo conforman.
En el contexto mexicano, la Administración General de Grandes Contribuyentes, perteneciente al Servicio de Administración Tributaria (SAT), se encarga de los procesos de recaudación, auditoría, atención y vigilancia jurídica de Grandes Contribuyentes. Esto incluye a los contribuyentes que forman parte de un grupo de empresas y que optan por determinar el Impuesto Sobre la Renta (ISR) sobre los resultados consolidados del grupo en lugar de hacerlo individualmente por cada sociedad. Esta práctica proporciona un beneficio en términos de flujo de efectivo para el grupo, ya que posterga el pago del ISR hasta que se desconsolide el grupo, se desincorpore alguna de las empresas o se generen utilidades. Anteriormente, con la reforma fiscal de 2010, el diferimiento del pago del ISR estaba limitado a cinco ejercicios fiscales.