‘Son tiempos de ansiedad’
Víctor Piz
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, advirtió que la economía mundial está en peligro de quedarse estancada en la senda del bajo crecimiento y el alto endeudamiento.
“Eso significa menores ingresos y menos empleos. También significa menores ingresos gubernamentales, por lo tanto menos inversión para apoyar a las familias y luchar contra desafíos a largo plazo como el cambio climático. Son tiempos de ansiedad”, subrayó en una conferencia de prensa.
La funcionaria internacional dijo que, en el marco de las reuniones anuales de otoño que celebraron el FMI y el Banco Mundial esta semana en Washington, las instituciones de Bretton Woods pidieron a los gobiernos que lleven a cabo reformas para revertir la situación.
“Estamos proponiendo reformas para impulsar la liberalización y movilizar recursos internos para obtener financiamiento adecuado”, aseguró Georgieva.
El FMI presentó el martes sus más recientes perspectivas de crecimiento y estimó que la economía global crecerá 3.2 por ciento este año, la misma cifra proyectada en julio, mientras que redujo en 0.1 puntos porcentuales la previsión de 2025, también a 3.2 por ciento.
Lo definió como un crecimiento mundial estable, aunque modesto.
El organismo multilateral estimó que la economía mexicana crecerá 1.5 por ciento en 2024 para luego desacelerar a 1.3 por ciento el año entrante.
Para este año aplicó a México un recorte de 0.7 puntos porcentuales desde la proyección de julio y para 2025 disminuyó su previsión en 0.3 puntos porcentuales.
Durante la conferencia, Georgieva advirtió que, aunque la economía mundial se ha mantenido notablemente bien, la inflación sigue disminuyendo gracias a los esfuerzos concertados de los bancos centrales, el crecimiento se mantiene en territorio positivo y las tasas de interés están bajando, “la gente no se siente bien acerca de sus perspectivas económicas”.
La directora gerente del FMI contó que “a todos (los gobernantes) les pregunto aquí: ¿cómo está su economía? La respuesta es buena. ¿Cómo está el estado de ánimo de su gente? La respuesta no es tan buena. Las familias aún sufren por los altos precios y el crecimiento global es anémico”.
Si bien se espera que la que la economía global crezca 3.2 por ciento este año y se desacelere al 3.1 por ciento de crecimiento promedio anual en cinco años, “esta es la perspectiva a mediano plazo más baja en décadas”, dijo.
Además, “vivimos en una economía global más fragmentada. Mientras tanto, la deuda pública va camino de superar los 100 billones de dólares este año, un máximo histórico, equivalente al 93 por ciento del PIB mundial. Para 2030 esperamos que esa cifra se acerque al 100 por ciento del PIB”, resumió.
El regreso de Trump
Lo dicho por Georgieva no es para echar en saco roto, menos cuando los inversionistas globales están ajustando cada vez más sus portafolios en previsión de importantes cambios en los mercados financieros impulsados por la perspectiva de que Donald Trump recupere la presidencia de Estados Unidos el próximo mes.
Los mercados parecen inclinarse hacia una victoria del candidato republicano, que de concretarse generará volatilidad en las monedas de países emergentes, como el peso mexicano, así como incertidumbre en las economías que tienen un mayor intercambio comercial con EU, como México, su principal socio y proveedor.
En la Encuesta Citibanamex de Expectativas de esta semana, el consenso de analistas de mercados anticipa un crecimiento del PIB de México de 1.5 por ciento para 2024, igual que en la encuesta quincenal previa.
Pero para 2025, la proyección para el crecimiento de la economía mexicana se revisó a la baja a sólo 1 por ciento desde 1.2 por ciento apenas 15 días atrás, además de representar el cuarto recorte consecutivo desde 1.5 por ciento en la encuesta del 20 de agosto.
Los analistas tendrán una perspectiva de menor crecimiento para México el próximo año, si Trump gana la elección del 5 de noviembre y mantiene la retórica política de su campaña sobre la agenda en las esferas migratoria y de seguridad, arancelaria y comercial e incluso geopolítica.