Recomienda especialista mantener vigente el decreto que prohíbe la siembra y comercialización del maíz transgénico en México
Ante el riesgo que pudiera representar para la salud y ante el hecho que nuestro país es reserva mundial maíces criollos, es necesario que la próxima administración federal que encabeza Claudia Sheinbaum mantenga vigente el decreto que prohíbe la siembra y comercialización de maíz transgénico en nuestro país, recomendó Luis Armando Becerra Pérez.
El doctor en Ciencias Económicas de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), estableció que a nivel mundial ya existen evidencias científicas de consecuencias secundarias en seres humanos por el consumo de maíz transgénico.
“El decreto que se tiene de evitar el consumo de maíz transgénico para consumo humano, desde mi punto de vista es correcto y algo más, si permitimos que el maíz transgénico se siembre masivamente en México, el maíz transgénico, aunque uno no lo ve, una vez que esté en la floración a través de la polinización puede volar y penetrar en otro organismo, en otro maíz por ejemplo en maíces criollos y entonces infectarlos por decirlo de esa manera”, advirtió.
Becerra Pérez consideró que en caso de aprobarse la siembra de maíz transgénico el campo de México se vería inundado de genes que no queremos porque nuestro país es la reserva mundial de estos granos criollos.
“Por qué es malo o por qué no queremos consumir maíz transgénico, simplemente preguntémosles a los europeos, a poco los europeos consumen maíz transgénico; hablemos de Holanda, de Inglaterra, de Francia, de España consumen ellos transgénicos, no porque todo mundo pensamos y qué tal si esto tiene una consecuencia secundaria que hay evidencias científicas al respecto”, detalló.
Destacó que México es autosuficiente en producción de maíz blanco para consumo humano y que de hecho Sinaloa es el estado que más aporta para satisfacer la demanda del mercado nacional.
Luís Armando Becerra Pérez reconoció que en donde México sí tiene problemas es en la producción de maíz amarillo que se destina para consumo animal y como alternativa a ello propuso que se siga impulsando la siembra de semillas hibridas, que en algunas zonas ya están dando buenos rendimientos.