Plan de 100 días permitirá a Sheinbaum delinear rumbo y consolidar promesas
Lidia Arista y Carina García
Aún no toma posesión como la primera mujer en la Presidencia de México y Claudia Sheinbaum ya tiene en la mira sus primeros tres meses de gobierno. La presidenta electa quiere resultados desde el arranque de administración y ya en el diseño de lo que será su Plan de 100 días.
Si bien será presentado el 1 de octubre cuando asuma el poder, la presidenta electa adelantó este jueves algunos de los ejes prioritarios para su sexenio.
Seguridad, salud, corrupción, obras y programas sociales, serán los rubros en los que apunte sus primeras medidas, lo que le permitirá consolidar compromisos de campaña en busca de un arranque sólido de lo que ha llamado la construcción del segundo piso de la “Cuarta Transformación”.
Puntos prioritarios
Mantener e incrementar programas sociales, no aumentos a precios de energías, evitar que suba el precio de la canasta básica, dar impulso a la educación y salud, son algunos de los puntos prioritarios de Sheinbaum para sus primeros meses como presidenta.
Y en un hecho similar a lo que hizo el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador al asumir en el 2018, luego de asumir el cargo en la Cámara de Diputados, Sheinbaum estará en el Zócalo de la Ciudad de México, donde delineará uno a uno los 100 compromisos de su gobierno.
Aquí algunos de los que delineó este 15 de agosto:
Para Azucena Rojas Parra, profesora de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno en el Tecnológico de Monterrey, los primeros 100 días son clave para cualquier gobierno porque marcan la dirección y prioridades de una nueva administración.
“Los primeros tres meses son sumamente importantes para marcar una señal de hacia dónde va el nuevo gobierno y también para aprovechar ese bono de aprobación con el que llega cualquier gobernante”. Azucena Rojas Parra, profesora de Tecnológico de Monterrey.
A diferencia de quien será su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, Sheinbaum ha comenzado a trabajar en su proyecto de 100 días y para ello ha realizado reuniones con los miembros de su futuro gabinete y con gobernadores, incluyendo a los de oposición.
Así, faltando más de un mes para que tome posesión, se reunió y escuchó a los mandatarios estatales para saber cuáles son las obras prioritarias para su entidad y en los próximos días lo hará con los hombres y mujeres que ocuparán una secretaría de Estado o que forman parte de su gabinete legal.
Conoce más:
Sheinbaum ofrece al menos una obra prioritaria en cada estado para 2025 Por segundo día consecutivo, Claudia Sheinbaum se reúne con gobernadores para analizar los obras de infraestructura para el siguiente año.
“Que todos tengamos claro qué vamos a hacer y cómo lo vamos a hacer porque no se trata llegar el 1 de octubre a planear, sino ya a ejecutar nuestras acciones principales y la ejecución del plan nacional de desarrollo 2024-2030”, dijo en una conferencia de prensa el pasado 25 de julio.
El Proyecto de Nación aprobado por Morena, que es la base para el Plan Nacional de Desarrollo 2024-2030, habla de una reforma al Poder Judicial, austeridad republicana y lucha contra la corrupción; distribución y bienestar social, un gobierno feminista, soberanía alimentaria, soberanía y transición energética, así como de salud con dignidad.
Los temas clave para los primeros 100 días
Las condiciones para sus primeros 100 días parecen inmejorables: Sheinbaum llega como la presidenta más votada de la historia reciente de México , el presidente Andrés Manuel López Obrador saldrá con una aprobación ciudadana superior al 60%, y su partido y aliados tienen una mayoría calificada en la Cámara de Diputados y cerca de tenerla en el Senado de la República.
Diana Pérez, catedrática de la Universidad Intercontinental, considera que hay grandes expectativas hacia el gobierno que encabezará Claudia Sheinbaum, por lo que en sus primeros 100 días tendrán que llegar los primeros resultados.
“El hecho de que Claudia Sheinbaum haya prometido resultados rápidos en sus primeros 100 días ha creado expectativas muy altas. Esto podría jugar en su contra si no logra cumplir con esos compromisos de manera tangible y efectiva porque podría generar desilusión en algunos sectores de la población”, explica.
“Nadie debe temer a nada”, asegura Sheinbaum al recibir constancia Mónica Soto, magistrada presidenta del Tribunal Electoral, le expresó el reconocimiento de que se convierte en la primera mujer presidenta en la historia de México.
Sheinbaum tiene la posibilidad de realizar prácticamente cualquier cambio a la legislación o emprender cualquier nueva política porque tiene el tiempo y el respaldo para ello.
Para las expertas consultadas, en sus primeros 100 días de gobierno hay temas ineludibles, entre ellos seguridad y salud.
“Tres áreas son clave y son en las que debe enfocarse: seguridad y justicia, recuperación económica y social, y transparencia y combate a la corrupción, son vitales”. Diana Pérez, catedrática de la Universidad Intercontinental.
Sheinbaum iniciará su gobierno en medio de una crisis de violencia, la cual ha dejado más de 180,000 homicidios dolosos, más de 100,000 desaparecidos y con delitos como extorsión al alza. Además con problemas de narcotráfico, disputa de organizaciones criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa, y la presión de Estados Unidos para frenar el tráfico de drogas, en particular el fentanilo hacia esa nación.
Las limitantes
Una de las limitantes que tendrá Sheinbaum en el arranque de su gobierno serán los recursos económicos.
La morenista se ha pronunciado en contra de una política fiscal, pero mantendrá el gasto en programas sociales, lo cual dificulta la ecuación para el gasto.
Un análisis de la organización México Evalúa , advierte que al Gobierno de Sheinbaum le tocará sufrir la resaca del endeudamiento desmedido de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Para enfrentar sus compromisos, Sheinbaum acentuará la política de austeridad en el gobierno y prevé recortes al gasto, lo que le podría dificultar cumplir con sus promesas de campaña.
“De 2016 a 2017 (en el gobierno de Enrique Peña Nieto) cuando se aplicaron las medidas de austeridad, los principales conceptos sacrificados fueron la inversión, recortadas en 26%, y los subsidios y transferencias en 12%”, explica el artículo de México Evalúa titulado “Iniciará Sheinbaum sexenio al estilo Milei: con recortes al gasto”.
Rodrigo Salazar Elena, profesor de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), plantea que Sheinbaum sabe ya la situación de las finanzas y que se carece de los suficientes ingresos para atender los ambiciosos programas “pero sobre todo los proyectos favoritos de infraestructura”, que aún están en curso.
“No se tiene la capacidad de financiar estos proyectos del presidente sin recurrir a dos fuentes, altamente indeseables ambas: una es la deuda que durante mucho tiempo el gobierno se las ingenió para ocultar el inmenso nivel de endeudamiento y la otra fuente de financiamiento ha sido peor, pues es la cancelación tanto formal como en los hechos, de otros rubros de gasto, como el destinado al sector salud”, comenta.
El estilo de gobierno
En los primeros 100 días, también es posible identificar cuál será el estilo personal de gobernar.
Claudia Sheinbaum ha adelantado que no tendrá críticas ni deslindes del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues forman parte del mismo movimiento político, sin embargo, sí tendrá su propio sello de gobierno.
“Lo que quisieran es que hubiera un deslinde, que marcara diferencia, que lo criticara, no lo voy a hacer, nunca (…) Sin temor a equivocarnos, decimos, Andrés Manuel López Obrador el mejor presidente de México” Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México.
Ese distintivo lo ha dejado ver en la etapa de la transición. A su gabinete incorporó a perfiles que ya la acompañaron en la Jefatura de Gobierno, y si es cierto que ha optado por conferencias al estilo López Obrador, las de Sheinbaum son más breves.
“Ella necesita imprimir su propio sello en la Presidencia y con ello hacer una diferencia de su gobierno con el de López Obrador”, agrega Diana Pérez, académica de la UIC.
Tras recibir su constancia de mayoría como presidenta electa, Sheinbaum enfrenta una nueva etapa en la que podría estar a prueba su autonomía ya que a 45 días de que asuma el cargo el presidente Andrés Manuel López Obrador no ha soltado las riendas y sigue presente en la toma de decisiones, considera el politólogo de la FLACSO.
“Estamos inmersos en la Reforma Judicial y el Plan ‘C’ y esa es la agenda del presidente saliente… esto de verdad es inédito, si acaso ésta es una situación como la que se vivió cuando José López Portillo nacionalizó la banca como última demostración del su gran poder”, sostiene.
“Sheinbaum no ha tomado las riendas porque López Obrador aún esta muy activo tomando decisiones”. Rodrigo Salazar Elena, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
“Es tiempo de mujeres… la política se hace con amor”, sostiene Sheinbaum Luego de recibir su constancia de mayoría, la presidenta electa celebró con seguidores en el Metropólitan y anunció que habrá una nueva etapa, pero rechazó una separción con López Obrador.
En los primeros tres meses de gobierno, también podrá evaluarse qué tipo de relación tendrá como jefa de Estado frente al mundo, pero de manera particular con Estados Unidos.
“Es muy importante la postura de México frente a los Estados Unidos. Sheinbaum va a empezar en octubre y en noviembre se elegirá al nuevo presidente o presidenta de Estados Unidos, por lo que tendrá que definir muy rápido su postura para empezar a trabajar en temas que son impostergables como la renegociación del T-MEC”, agrega Azucena Rojas.
Así, a partir de este 15 de agosto comienza una nueva etapa para Sheinbaum: la de presidenta electa, la que ofreció gobernar para todos los mexicanos.